El domingo 22 de mayo las ciudadanas y ciudadanos tendremos el poder de decidir quién queremos que gobierne nuestro Ayuntamiento. Es una cita importante porque hablamos de qué futuro queremos para nuestra ciudad. Compromís per Elx planteamos un programa con tres grandes bloques de propuestas.

Una ciudad por los derechos sociales y la cohesión. Donde el ayuntamiento lidere las políticas por la igualdad, contra la exclusión social y la pobreza. Unas políticas que favorezcan la integración en la diversidad, combatiendo todo tipo de exclusión por el origen, la cultura, el sexo o la orientación sexual. Queremos un ayuntamiento que garantice el acceso universal a servicios públicos sanitarios, educativos y culturales. Que garantice el acceso de todo el mundo a las tecnologías de la información y la comunicación. Un ayuntamiento que promueva una ciudad educadora y comprometida con la cultura. Un ayuntamiento que sea activo para garantizar el derecho a la vivienda, promoviendo la vivienda social y de alquiler. Que intervenga activamente con políticas sociales, de rehabilitación urbana, salud pública y participación ciudadana, especialmente en los barrios que sufren más problemas de degradación. Hay que gestionar con rigor los recursos públicos en unos tiempos difíciles para las finanzas locales, pero antes de nada hay que priorizar las políticas sociales, porque la política social no es un gasto sino una inversión de futuro.

Una ciudad por una nueva economía ecológica generadora de empleo. El gobierno local tiene que participar del cambio de modelo productivo. Un cambio imprescindible para salir de la crisis, favoreciendo la generación de nueva ocupación, la formación de los trabajadores y las trabajadoras y los proyectos empresariales innovadores. Necesitamos un ayuntamiento que exija a la Generalitat Valenciana la transferencia de las políticas activas de empleo. Queremos un ayuntamiento líder en el cambio tecnológico, en la transición hacia la sostenibilidad, que promueva el ahorro y la eficiencia en el uso de la energía, el agua y la gestión de los residuos. Un ayuntamiento que priorice la reducción de la contaminación y de los gases que provocan el cambio climático, con una movilidad sostenible que limite el uso del coche a favor de los/las peatones y del transporte público. La salud pública y la seguridad de las personas tienen que estar por encima de cualquier otra consideración.

Una ciudad por la calidad democrática, la diversidad y la convivencia. Hay que establecer una nueva relación entre los vecinos y las vecinas y la administración local. Ni las personas son clientes ni la administración es una simple dispensadora de servicios. Los vecinos y las vecinas son ciudadanos y ciudadanas con derechos y deberes y el ayuntamiento tiene que ser un gobierno abierto a la participación y al diálogo que actúe con eficacia y transparencia. En estas próximas elecciones miles de personas de otros países estarán, todavía, excluidas del derecho a voto. Es un grave déficit democrático que hay que denunciar. Queremos un ayuntamiento líder en la lucha contra la corrupción y por la transparencia, que garantice plenamente el acceso a la información que genera. Un gobierno local que lidere las políticas de participación ciudadana.