Mientras este país celebra el triunfo de su selección nacional, mientras España se llena de gritos de euforia y parece estar más viva que nuncaÉ En realidad, muere sin remedio.

Le ahoga además del triste infierno del paro, los super ivas, las cuentas que no salenÉ El abandono de animales

Ya sé, ya sé que todo el mundo piensa que es hora de celebrar y no de llorar pero ¿Cómo hacer lo uno olvidando lo otro?

El calendario de julio avanza. La temporada estival se adentra en lo más profundo: rebajas, calor, más calor yÉ Este año probablemente batamos uno de los récords más penosos de este país, el del número de animales abandonados.

Las familias, pese a todo, han vuelto a salir de vacaciones, sí, pero este año más a la antigua usanza.

España parece seguir la estela de un "cuéntame" de los años sesenta. Los hijos se van de relajo a casa de los padres. Los padres veranean en el apartamento de los primos de la playaÉ Y así, los españolitos de a pie, esos que andan estos días embutidos en camisetas rojas hiper transpirables pero asfixiados por hipotecas, pagos y un no saber qué va a pasar, se marchan, como todos los años, en busca del merecido descanso.

Y muchos, la mayoría, lo hacen al completo. No dejan olvidado a nadie de su familia pero otrosÉ Se estima que más de medio millón de personas estarán a estas alturas dando el finiquito a su mejor amigo en nuestro país. Las carreteras de España se llenan y llenarán de cochesÉ Pero, también de perros que buscan el rastro de su familia y de gatos que dejan, sino todas, casi todas sus vidas intentando sobrevivir.

Es el abandono de animales. Ése que siempre ha estado, está y estará en crisis.

Por eso, sí, este año somos campeones de mundo y eso, supongo, suena a muy importanteÉ Pero, no crean, no será el fútbol lo único en lo que lo seremos.

Ese número uno tan ansiado compartirá vitrina con otros récords no tan agradables como, por ejemplo, aquel que nos sitúa entre los países del mundo donde más animales se abandonan y se maltratan cada añoÉ

En eso, mucho me temo que, desde hace años, también somos campeones.