El segundo proyecto de Lluís Planagumà al frente del banquillo del Hércules se estrenó ayer con un triunfo relativamente cómodo en Torrellano (1-5) y una petición cristalina: «Se ha visto lo que nos falta en la plantilla, de hecho hemos tenido que utilizar futbolistas del filial. Necesitamos alguien que juegue por fuera y alguien que lo haga entre líneas, que vaya al espacio, que pueda recibir de espaldas y ser muy vertical».
El preparador barcelonés demanda dos perfiles muy específicos: «Tenemos que hacer la mejor plantilla posible y eso pasa por incorporar lo que nos falta. A partir de aquí, que cada uno haga su trabajo. Yo seguiré utilizando todos los futbolistas de los que disponga mientras estén con nosotros porque esa es mi tarea. Nos falta juego por fuera y nos falta velocidad y desequilibrio, sobre todo entre líneas, algo que ya nos faltó la temporada pasada. Cuando tengamos jugadores distintos podremos intentar jugar de un modo diferente, si no...», explicó el entrenador al final del encuentro.
En cuanto a las desavenencias surgidas entre el técnico y Javier Portillo tras el final del curso, Planagumà quiso restarle importancia: «No hay ninguna colisión, se trata solo de poner cosas en común. No siempre hay que pensar igual, eso nos haría autocomplacientes. Pasa en todos los clubes, y eso es lo que nos hace mejorar, no tiene por qué ser algo negativo. Ahora analizaremos conjuntamente las opciones que nos da el mercado pensando en mejorar el equipo. Y si existe la posibilidad, tendrá que ser el club el que decida si se hacen los fichajes, si se dan bajas o si nos quedamos como estamos», subrayó Planagumà, que evitó nombrar a Juli y a Jona como los señalados para salir del equipo si se cierran las operaciones abiertas, la más avanzada, la del extremo del Elche Borja.
«Queremos evolucionar en nuestro juego y para eso necesitamos perfiles diferentes a los que ahora tenemos», volvió a insistir el preparador catalán. «Jona (titular ayer por las molestias de Benja, que ni se vistió) y Juli (que cerró la goleada tras disputar la media hora final) están respondiendo porque son profesionales. Estas situaciones se repiten siempre en los clubes», advirtió el entrenador del Hércules. «Hay que valorar la actitud de los futbolistas, sus hábitos y si llega el caso de poder mejorar la plantilla pues tomaremos una decisión», recordó eludiendo personalizar dando nombres propios.
«Y no se trata de que un futbolista me convenza a mí más que otro, se trata de tener jugadores con los que poder hacer el fútbol que queremos, y ahora no tenemos a esos futbolistas. Si no los podemos conseguir, nos amoldaremos a lo que hay, pero ahora hay que valorar todo lo que nos puede ofrecer el mercado. Nada más», argumentó a pesar de asegurar, a renglón seguido, que su grado de satisfacción con la plantilla actual es, del uno al diez, «un diez», rotundo.
«Me gustan todos los jugadores que tenemos ahora, yo no seré quien cuestione sus trayectorias; otra cosa distinta es que esas cualidades se ajusten a lo que realmente pecisamos si queremos evolucionar el fútbol que hicimos el año pasado», recalcó Palanagumà, que está de acuerdo con que el Hércules recupere el horario dominical para disputar sus encuentros de Liga en el Rico Pérez.
El técnico, que ayer rompió por fin su silencio tras el fiasco de Ponferrada, explicó que renovó porque recuperó las fuerzas tras la decepción y tras hablar con todas las partes. Además, valoró una de sus decisiones más controvertidas, visto el desenlace y la no continuidad en el equipo de Adrián: la suplencia de Nani. «Cuando aposté por él en el «play-off» lo hice por criterios estrictamente deportivos, no pensé en si uno seguiría y el otro no. Acepto que mucha gente no lo entendiera, pero no me pagan para que la gente entienda lo que hago, sino para ganar partidos e hice lo que consideraba mejor para conseguirlo», arguyó Planagumà.
