Los trabajos para ampliar el perímetro de seguridad en el IES de Torrellano, una que vez que las obras de reparación de la fachada han sido paralizadas, al quebrar la empresa adjudicataria, arrancaron ayer, y lo hicieron a marchas forzadas para que el recinto educativo cumpla con los requisitos de seguridad que permitan el desarrollo de la actividad académica a partir del lunes, cuando está previsto que arranque el curso 2019-2020.
Esta es la opción por la que se decantaron los responsables de la Conselleria de Educación una vez analizaron la situación, sobre el terreno, y, según indicaron desde el Ayuntamiento, «constataron que se pueden dar las clases adoptando medidas complementarias a las ya existentes en la obra». De esta forma, la Conselleria ha tratado de evitar poner en marcha la segunda opción que se puso sobre la mesa cuando surgió el problema la semana pasada, y que es la de que los alumnos del IES de Torrellano asistan a clase en otro instituto de Elche en horario de tarde.
Para hacer menos traumática esta medida, que no se ha seguido explorando, al menos por el momento, la Conselleria de Educación estaba dispuesta a asumir el coste del servicio de transporte de los alumnos en autobús.
No obstante, esta opción, según explicó ayer la concejal de Educación, María José Martínez, no se llegó a explorar más, ni se apuntó hacia ningún instituto de forma concreta para albergar a los alumnos, ya que, insistió la edil, «los técnicos de la Conselleria han asegurado que con las medidas, ampliando la distancia del vallado y protegiendo los accesos, las clases se podrán dar en el IES de Torrellano con total seguridad desde el lunes».
Así y todo, desde el Ayuntamiento de Elche aseguraron ayer que van a estar muy pendientes del desarrollo de los trabajos este viernes, para garantizar que se cumplen todas las medidas de seguridad.
Los trabajos para adoptar nuevas medidas de seguridad empezaron ayer por la mañana en el instituto de la pedanía ilicitana. Los operarios empezaron a ampliar la distancia entre la fachada, que está rodeada por andamios, y el vallado metálico, que se va a dejar en tres metros.
Además, se van a habilitar un total de tres bocanas de acceso al instituto que deben quedarse hechas entre hoy y mañana, según indicaron desde el centro educativo, para que las clases puedan arrancar el lunes.
Estas medidas deben ser suficientes para que los propios técnicos de la Consellería de Educación certifiquen que el centro puede iniciar la actividad académica, y eso mismo es que lo que ayer esperaban desde el Ampa del IES Torrellano, donde ya se habla de realizar nuevas protestas para exigir a la Conselleria de Educación que se agilice al máximo la resolución de este nuevo conflicto que tiene que ver con las infraestructuras educativas de la pedanía.
A las familias de Torrellano no se les olvida que el problema en la fachada del instituto se remonta a 2016, y por eso exigen que los trámites para volver a contratar la obra de reparación de la fachada del inmueble se resuelvan en el menor plazo de tiempo posible.
Protestas
El último curso se caracterizó en Torrellano por las protestas que impulsaron los colectivos de padres y alumnos para reclamar el arreglo de la fachada del instituto y la ampliación del colegio La Paz, con barracones durante más de una década.
