La conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública comunicó ayer a la Asociación Provincial de Hoteles de Alicante que acepta su petición de que los hoteles puedan volver a dar el servicio del bufé tradicional (autoservicio) pero guardando una serie de normas, entre las que destaca el que los clientes deban guardar en el comedor una distancia mínima de 1,5 metros. La flexibilización de las medidas -hasta ahora el personal del hotel es el que debía servir la comida elegida por el cliente- responde a una petición concreta cursada por los hoteleros la semana pasada, debido a las quejas que habían recibido de los clientes por las colas y por el sobrecoste económico que había supuesto para los establecimientos. Petición que también había realizado la patronas Hosbec, la cadena Servigroup y varios hoteles de forma individual ante los problema surtido en el servicio bufé. De esta forma, la Generalitat atiende la petición de los hoteleros que le habían trasladado las medidas de flexibilización adoptadas por otras autonomías turísticas como Baleares, Murcia y Andalucía.
Sanidad permite volver a la práctica habitual anterior a la crisis sanitaria del covid-19, pero exige que la señalización sea clara y visible por medio de cartelería vertical y horizontal, así como marcar el suelo con señales para informar del itinerario. Se deben limpiar cada quince minutos las zonas comunes por las que pasan los clientes y establecer un sistema de supervisión de estas medidas. El bufé clásico de los hoteles se ha convertido en uno de los servicios más apreciados por los turistas. Es más, muchos establecimientos ofrecen bufés tematizados durante la semana.
Victoria Puche, presidenta de la Asociación Provincial de Hoteles de Alicante, celebró ayer la noticia, «que no supone para nada bajar la guardia en las medidas higiénicas y de seguridad pero nos permite flexibilizar las condiciones del personal a la hora de prestar este servicio y responder a la petición de los clientes». Puche, al contrario que sus colegas de Benidorm, afronta agosto con optimismo, al menos en lo que se refiere a hoteles de Alicante, donde hay españoles y siguen dejándose ver los británicos que llegan en vuelos de Easyjet y Ryanair.
Promoción
Por otro lado, la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) ha lanzado una nueva iniciativa para apoyar al sector turístico en el peor verano de su historia por los demoledores efectos de la pandemia del covid. La campaña se acompaña de un vídeo promocional en el que empresarios de la Comunidad lanzan mensajes de aliento y apoyo al sector, y animan a visitar las tres provincias. Entre ellos, Adolfo Utor (Balearia) y Pere Joan Devesa (Hoteles Poseidón). La gran jornada por el Turismo que todos los años celebra AVE En Benidorm en junio se ha trasladado al 6 de octubre.
«Nunca ha sido más prioritario que ahora aunar, en un mismo mensaje, la importancia del turismo para cada uno de nuestros pueblos y ciudades de la Comunidad Valenciana y de España. Los empresarios somos conscientes de que será una temporada que se verá afectada por las restricciones impuestas y por la falta de turistas extranjeros, tan presentes en nuestro país cada año», subrayó ayer AVE en un comunicado.
