Dos pateras llegaron ayer a Alicante y La Vila Joiosa y catorce de sus ocupantes fueron interceptados y deberán pasar una cuarentena de dos semanas a causa de la crisis sanitaria por el coronavirus, aunque todos se encontraban aparentemente en buen estado de salud. Trece de los inmigrantes son de origen sirio y uno argelino. Los inmigrantes se encontraban ayer tarde recluidos ayer en dependencias de la Policía Nacional, que les ha abierto expediente para su repatriación y estaba a la espera de que Cruz Roja se haga cargo de ellos debido a que los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) de todo el país están cerrados por el estado de alarma y el cierre de fronteras.
Cruz Roja tenía previsto trasladar hoy en autobús a estas personas hasta un centro de atención que tiene en Chiclana (Cádiz).
La primera patera que llega a la costa de Alicante durante el estado de alarma fue interceptada sobre las seis media de la mañana en la playa del Postiguet, dos horas después de ser detectada por la Guardia Civil a través del Servicio Integral de Vigilancia Exterior (SIVE). La Guardia Civil alertó del hecho a la Policía Nacional y movilizó a sus agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia (Usecic) y del cuartel de Sant Joan. Al lugar también se desplazaron efectivos de la Policía Local.
La segunda patera fue descubierta por un pesquero cerca de la piscifactoría de La Vila Joiosa. Estaba a la deriva y sus ocupantes lograron desembarcar sin ser descubiertos inicialmente. La Policía Local detectó a tres cerca de la playa del Torres y tras huir a la carrera lograron detener a uno de ellos.
