Apenas dos días después de que el Consejo Escolar de Alicante haya aprobado, a instancias del PP, que la ciudad se divida en solo tres zonas escolares para elegir colegio, y no nueve como actualmente, la Conselleria de Educación afirma, a preguntas de INFORMACIÓN, su rotundo rechazo a una medida que considera «discriminatoria», además de que «incumple la normativa tanto estatal como autonómica respecto de la admisión de alumnos», como subraya el secretario autonómico y número dos de la conselleria, Miguel Soler.
«En Alicante se va a seguir aplicando la misma distribución de zonas escolares que hay en este momento», sostiene el responsable educativo. La potestad de cambiar la zonificación escolar, oído el Consejo, recae en la directora territorial de Educación, Tudi Torró, delegada de la conselleria en la provincia. «Lo rechazará por escrito y se seguirá aplicando lo que hay», reitera Soler.
Votación
Trece votos a favor, todos ellos del sector de la enseñanza concertada, frente a once en contra -de representantes de la enseñanza pública- y dos abstenciones, dieron el miércoles por la noche la victoria en el Consejo Escolar a las pretensiones del PP, que ya había anunciado su intención de revertir la zonificación escolar desde que en 2016 el tripartito municipal devolvió los nueve distritos existentes antes de que en 2013 el PP implantara las mismas tres mismas zonas que quería recuperar ahora.
La distribución que preconiza el PP a la hora de elegir colegio deja libertad absoluta a quienes viven en el centro de Alicante, y limita en otras dos zonas, el noroeste y la de playas, el resto de centros educativos en función de la cercanía de domicilio.
Miguel Soler recalca que este acuerdo del Consejo Escolar «se podrá recurrir incluso ante el Tribunal Supremo porque incumple las leyes educativas y la Constitucional porque no respeta la igualdad para todos los ciudadanos, atenta a los principios más básicos». Según explica el secretario autonómico, que los ciudadanos que viven en el centro de la ciudad tengan opción prioritaria para escoger cualquier colegio, y los que viven en las otras dos zonas -el noroeste hacia San Blas y la de playas- solo la mitad de los centros, «no tiene por donde cogerlo».
Solo en el caso de que el Consejo Escolar hubiera propuesto «otras zonas distintas a las actuales pero bajo la premisa general que marcan las leyes educativas de la proximidad del centro al domicilio y el número de hermanos para baremar las solicitudes, desde la Conselleria de Educación se habría podido estudiar y analizar», añade Soler. «Ni la LOE ni la LOMCE han suprimido la proximidad al centro y con el distrito único la suprimes», advierte.
Por su parte, el colectivo de directores de colegios e institutos de toda la provincia, cuyos portavoces presiden a su vez las respectivas asociaciones autonómicas ADIP-PV y ADIES-PV, Ginés Pérez Gea y Toni González Picornell, emitieron ayer un comunicado conjunto para mostrar su «desacuerdo con la aprobación del Consejo Escolar de Alicante en dos únicos distritos escolares y un tercero especifico al que se asigna el privilegio de zona única».
Señalan los directores que esta distribución genera «recorridos que pueden superar los cinco kilómetros», y que puede provocar «enfrentamientos entre las familias al suponer un agravio comparativo de una sobre el resto».
Concluyen tachando de «inadmisible» la propuesta de Consejo e instan a la dirección territorial a dejar la zonificación como está.
«Mayor demanda que oferta exige zonificar la ciudad»
El número dos de Educación, Miguel Soler, advierte de que cuando la demanda de plazas es superior a la oferta, hay que regularlo con un baremo que «debe ser igual para todo el mundo y por eso es estatal, está vigente desde la primera ley educativa»,afirma. Ejemplifica finalmente que en caso de empate es más razonable dar la plaza al que tiene hermanos y vive más cerca del centro. «El 90% de las familias logran ahora la primera o segunda opción que solicitan», recuerda.
