Decenas de miles de personas, 65.000 según la Policía Municipal, han participado este sábado en Bilbao en la manifestación anual de apoyo a los presos de ETA para pedir al nuevo Gobierno de PSOE y Unidas Podemos un cambio de la política penitenciaria.

El portavoz de la plataforma Sare, Joseba Azkarraga, ha pedido al nuevo Gobierno que "tenga muy en cuenta" la imagen de los miles de personas que "quieren la paz" y "terminar con la vulneración de derechos de las personas presas". La plataforma reivindica el acercamiento de los presos de ETA a Euskadi y la liberación de los reclusos enfermos.

Azkarraga también se ha dirigido a los diputados vascos en el Congreso para decirles que "es el momento" de que esta reivindicación se lleve a las Cortes Generales por tener un "consenso muy mayoritario en la sociedad vasca detrás". "¿Si no es ahora, cuándo?", les ha preguntado.

La marcha ha contado con el apoyo de EH Bildu y Elkarrekin Podemos y las tres formaciones independentistas catalanas (JxCat, ERC y CUP), así como todos los sindicatos vascos, incluidos UGT y CCOO.

No obstante, las delegaciones de Elkarrekin Podemos, CCOO y UGT no han incluido a sus máximos responsables y el PNV ha seguido sin respaldar esta movilización.

En la manifestación ha participado una amplia delegación de EH Bildu encabezada por Arnaldo Otegi, los secretarios generales de ELA y LAB y el responsable de Comunicación de Podemos Euskadi, Andeka Larrea.

También han estado el vicesecretario general de ERC, Isaac Peraire, y la parlamentaria Nuria Picas; el portavoz de JxCat, Eduard Pujol; y el diputado de la CUP Albert Botran.

El texto final ha sido leído por Rosa Rodero, viuda del sargento de la Ertzaintza asesinado por ETA Joseba Goikoetxea, y Axun Lasa, hermana de la víctima del GAL José Antonio Lasa.

En su declaración han pedido que no se hable en nombre de las víctimas y han reclamado que se incluya "valientemente en la agenda del Estado" el cambio de la política penitenciaria.

"Estamos hablando de derechos humanos y no de reivindicaciones políticas", han aseverado antes de señalar que el Estado no tiene un problema con una "organización disuelta e inexistente" como ETA, sino con la sociedad vasca, que reclama "que no se vulnere ningún derecho, tampoco el de las personas privadas de libertad".

Antes de la marcha, Otegi ha considerado que la situación de los presos de ETA "entra también en la agenda vasca" y que hay que exigir al Gobierno "una hoja de ruta clara y una solución".

El exsenador de Podemos Josetxo Arrieta ha pedido el acercamiento y el fin del trato excepcional a los presos de ETA, a los que ha exigido que reconozcan el daño injusto causado y condenen la violencia.

Nuria Picas (ERC) ha sostenido que la dispersión es un "castigo añadido" y Albert Botran (CUP) ha reclamado al nuevo Gobierno que "se corresponsabilice del proceso de paz, no siga de espaldas y cumpla con los derechos que les corresponden a los presos políticos vascos".

Por su parte, Eduard Pujol (JxCat) ha agradecido las "muchas muestras de solidaridad vasca" con el presidente, Quim Torra, y ha apelado a la "fraternidad" entre Cataluña y Euskadi porque "vienen momentos muy delicados de represión constante del Estado".

Horas antes de la manifestación, el presidente del PP, Pablo Casado, ha calificado de "lamentable" que Podemos se haya adherido a esta movilización que es un "nuevo escarnio para las víctimas", y se ha preguntado: "¿De qué parte está Sánchez?".