El comisario jubilado José Manuel Villarejo ha presentado ante la Audiencia Nacional un incidente de recusación para intentar apartar al instructor de la causa en la que se le investiga, Manuel García Castellón, días antes de que deba resolver sobre la prórroga de su situación de prisión provisional.

El escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, forma parte de la última ofensiva judicial de Villarejo, cuya defensa presentó una denuncia por prevaricación judicial continuada contra García Castellón ante la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo el pasado 4 de octubre que complementó diez días después con un escrito en el que incluía más acusaciones.

El contenido de ambas denuncias se da por incorporado al incidente de recusación, por el que pide que se aparte al instructor de la causa por falta de imparcialidad y prevaricación pero sobre el que se vierten acusaciones como la de filtrar información de la causa secreta a los medios o la de esconder material que podría salpicar a miembros del poder judicial en lo que califica de obstrucción con fines corporativistas.

"Existen sospechas objetivamente justificadas, es decir, exteriorizadas y apoyadas en datos objetivos, circunstancias que puedan hacer surgir el legítimo temor de que el criterio de juicio no sea la imparcial aplicación del ordenamiento jurídico", dice el escrito de recusación de Villarejo.

García Castellón instruye la causa desde el pasado mes de enero porque el anterior instructor, Diego De Egea, renunció a su puesto como juez de refuerzo del Juzgado Central de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional el 31 de diciembre de 2018, de modo que todas las causas que llevaba recayeron sobre él en tanto que titular de este organismo.

Villarejo hace otra lectura de los hechos. Dice que De Egea, que alegó motivos personales para dejar su puesto y ahora ejerce en la Audiencia Provincial de Madrid, "optó por dejar la instrucción antes de delinquir presionado" por los fiscales Anticorrupción que llevan la causa.

Reprocha las filtraciones

Apunta como prueba de que García Castellón carece de independencia que ha "destruido toda la actuación de su antecesor", si bien obvia que la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional revocó la decisión de De Egea de archivar dos piezas de la causa y también la de investigar por separado a uno de los socios de Villarejo.

El argumentario del comisario incide en que el instructor, "de manera reiterada viene ocultando datos esenciales" que "modificarían sustancialmente la causa, evidenciando con ello su falta de imparcialidad" y de "independencia jurídica".

Se centra en concreto en que "existen grabaciones mantenidas con responsables políticos de todos los gobiernos" a los que Villarejo dice que ha servido y que no obran en las actuaciones porque "están siendo destruidas o al menos, se intentan expurgar" para "que no decaiga la imputación por cohecho" sobre la que afirma, "gravita la instrucción".

Incide además en el asunto de las filtraciones y le atribuye tres titulares en relación a la causa para a continuación, pedir que se llame a declarar a los periodistas que los redactaron.

Se trata de informaciones relativas a que Tándem superará las 20 piezas separadas y a que la intención del juez es prorrogar la prisión de Villarejo, asunto que ahora está sobre la mesa dado que cumple dos años la primera semana de noviembre y la Fiscalía Anticorrupción ha pedido ya que se convoque la vista en que se revisará su situación, tal y como avanzó Europa Press. Para el comisario, esto "acredita su absoluta parcialidad" porque habría tomado una decisión "en su fuero interno" y además, la habría filtrado.