La Audiencia de Sevilla ha condenado al empresario Manuel Muñoz Medina a una multa de 13.800 euros por un delito de abuso sexual que cometió al simular un beso en los labios a Teresa Rodríguez, parlamentaria andaluza de Podemos, durante un acto celebrado en la Cámara de Comercio en 2016.

Según ha informado este lunes el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), la Sección Cuarta absuelve al acusado de los delitos contra la integridad moral y de atentado, por los que la diputada solicitaba 1 año y 9 meses de cárcel, y lo condena al pago de una multa de 23 meses a razón de 20 euros diarios por un delito de abuso sexual en concurso ideal con un delito leve de falta de respeto y consideración debida a la autoridad.

El acusado, para quien la parlamentaria también pedía un año de cárcel por abuso sexual, también deberá indemnizarla con 2.500 euros por daño moral, pues la Audiencia considera que "es indudable que los hechos (...) provocan en cualquier persona, sin necesidad de mayor prueba, un innegable impacto psíquico, desazón e incluso humillación que ha de ser compensado".

El tribunal, además, desestima la atenuante de reparación del daño, al entender que su petición de perdón en una entrevista radiofónica "no es lo suficientemente significativa y relevante", y la eximente incompleta de tener sus facultades mermadas por la previa ingesta de bebidas alcohólicas.

La sentencia, que no es firme, considera probado que el 20 de diciembre de 2016 se celebró en la planta baja de la sede de la Cámara de Comercio un acto organizado por la Agencia EFE al que fue invitada Rodríguez como diputada del Parlamento de Andalucía.

Una vez terminado el acto, Teresa Rodríguez fue invitada por la jefa de Protocolo de la Cámara, a instancias de su presidente, a subir a la primera planta para saludarla y mostrarle las dependencias y proyectos de la institución.

Cuando la víctima salió del despacho del presidente, el acusado apareció desde una sala contigua "con una copa en la mano" y, "conocedor" de quién era Rodríguez, "se dirigió apresuradamente hacia ella y de forma sorpresiva e inopinada, sin mediar palabra ni saludo previo, la rodeó por la espalda con su brazo derecho".

Luego la hizo "retroceder contra un rincón, al tiempo que aproximaba su cuerpo al de ella y le ponía la otra mano sobre la boca" para "a continuación" besarse esa misma mano.

"Incapaz de reaccionar", Rodríguez abandonó el lugar "de forma rápida" acompañada de la jefa de Protocolo, "a quien transmitió de manera inmediata su malestar e indignación", precisa el tribunal, que considera que el testimonio de la denunciante "ha sido claro, preciso y contundente".

La Audiencia también considera que las imágenes de una cámara de seguridad "corroboran la versión" de la afectada, mientras que el acusado manifestó "que fue un saludo normal, que no le puso la mano sobre la boca o que tampoco la agarró por la espalda" y lo calificó como "broma pesada".

"No se trata más que de una excusa inaceptable, tratándose como se trataba de dos personas desconocidas que no habían mantenido la menor relación", replica el tribunal.

El delito de abuso sexual del artículo 181.1 del Código Penal contempla una pena de prisión de 1 a 3 años o multa de 18 a 24 meses, de modo que el ponente argumenta que "la interposición de la mano del acusado entre su boca y los labios" de Rodríguez, "el carácter fugaz del acto y la gravedad de la conducta aconsejan la opción por la pena pecuniaria" y no la de cárcel.

La líder de Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez, ha manifestado su esperanza de que la sentencia que condena ayude a "proteger" a las mujeres.

En un audio difundido a la prensa, Rodríguez pide que "tomen nota todas aquellas mujeres que han sufrido algún tipo de agresión de este tipo. Cualquier contacto con finalidades sexuales claramente que hayas padecido sin tu consentimiento, sin tu voluntad, es delito y es denunciable".

"Que tomen nota también aquellos "señoros" a los que les gusta gastar este tipo de bromas, cuando son bromas y cuando no lo son, que también son delitos. Que la justicia al final llega y pone las cosas en su sitio", añade la parlamentaria andaluza.

Teresa Rodríguez donará el dinero a asociaciones de mujeres

La coordinadora general de Podemos Andalucía, Teresa Rodríguez, ha recordado que desde el principio dijo que donaría a asociaciones de mujeres la indemnización que pudiera obtener de la sentencia por la condena al empresario y exvocal de la Cámara de Comercio de Sevilla Manuel Muñoz Medina por los hechos ocurridos el 20 de diciembre de 2016, por un delito de abuso sexual. La indemnización a la víctima en principio es de 2.500 euros, mientras que además el condenado tendrá que pagar una multa de 13.800 euros.

En declaraciones a los periodistas, Rodríguez ha manifestado que cuando ha conocido la sentencia se ha acordado "de las mujeres más importantes" de su vida, que son su madre y su hija. Así, ha relatado que su madre "trabajó desde muy joven, sola, desde los años 60 de viajante de productos cosméticos y me contaba muchas veces como había sufrido este tipo de agresiones por parte de otros hombres y hablaba siempre de no dejarme avasallar por este tipo de actitudes".

En cuanto a su hija, Rodríguez ha señalado que se ha acordado de ella por "la voluntad que tengo de que ella no vuelva a vivir lo que vivió mi madre y lo que me ha tocado vivir a mí, sino que viva en una sociedad donde este tipo de prácticas sean definitivamente abolidas porque todo el mundo entienda que repercuten muy negativamente no solo en la mitad de la población, sino en el conjunto de la sociedad".

"Es importante que todos los hombres a los que le gusta este tipo de bromas, este tipo de prácticas, que no entienden que atentar contra la libertad sexual de otras personas, por más que sea en grados pequeños, es delito, se lo piensen dos veces la próxima vez que quieran hacer algo de este tipo", ha dicho Teresa Rodríguez.

Igualmente, ha manifestado que también es importante "que las mujeres que hayan sufrido este tipo de hechos o que lo puedan sufrir, sepan que pueden acudir a un tribunal que les darán la razón por un delito de abuso sexual".

Rodríguez ha incidido en que "los delitos de abusos sexual son delitos contra la libertad sexual de la persona que se ve inmiscuida en ello". "Este señor no me gasta una broma de cualquier tipo, me gasta una broma con contenido sexual, está atentando contra mi libertad sexual y eso está penado en el Código Penal como un delito de abuso sexual", ha añadido.

"Tiene que saberlo la sociedad entera y si este juicio sirve para eso, puede que sea de las cosas más significativas que haya hecho en mi tiempo en la política", ha concluido.