La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, ha afirmado este jueves en el Congreso que el buque español Open Arms, que permaneció 19 días en el Mediterráneo con más de cien migrantes a bordo, no quiso "en ningún momento" durante la crisis "venir a puerto español".

Durante la comparecencia en un Pleno extraordinario para informar de la gestión de la crisis del barco de la ONG Proactiva por parte del Gobierno en funciones, Calvo ha asegurado que el buque "nunca" pidió venir a un puerto español, que fue el ofrecimiento del Ejecutivo en funciones de Pedro Sánchez cuando desde la embarcación se alertó de su situación, el día 16 de agosto según Calvo.

Según el relato de la vicepresidenta, en ese momento el Gobierno español se puso en contacto con el italiano para pedir "ayuda y colaboración" ante una situación "complicada" en el Open Arms, y al no obtener respuesta de Italia, el Ejecutivo de Sánchez ofreció el puerto de Algeciras (Cádiz) porque tiene "los mejores instrumentos cotidianos" para atender a los migrantes que había rescatado el barco de la ONG.

En su intervención inicial en el hemiciclo, en una comparecencia solicitada por Unidas Podemos Calvo ha subrayado que el Open Arms había utilizado ya dos veces el puerto de Algeciras en las tres ocasiones en las que ha desembarcado en puestos españoles.

El PP acusa al Gobierno de hacer "negocio electoral" con los migrantes

La portavoz del PP en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, ha acusado este jueves al Gobierno en funciones de hacer "negocio electoral, politiqueo, bajo la máscara de la solidaridad" con el tema de la inmigración y barcos como el Aquarius y el Open Arms.

En su intervención en el pleno extraordinario en el que comparece la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, para hablar sobre la crisis de este último barco durante el mes de agosto, ha asegurado que "el sanchismo y el salvinismo son las dos caras de la misma moneda" a la hora de afrontar este asunto.

Porque los dos "utilizan a los inmigrantes para ganar votos", ha proclamado, ya que cree que el Gobierno de Pedro Sánchez "pesca" en el océano del "sentimentalismo irresponsable", mientras que los partidarios del ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, lo hacen "en la selva de la xenofobia".

Según Álvarez de Toledo, la primera obligación de la política era impedir que barcos como el Open Arms naveguen porque para rescatar náufragos ya está Salvamento Marítimo y porque son "la expresión de un turbio negocio" que el propio Gobierno español "conoce bien" porque lo aplica de forma "especialmente impúdica" en esta cuestión.

Para la portavoz popular, el Ejecutivo de Pedro Sánchez convirtió en un "spot publicitario" el Aquarius, tras llegar al Gobierno con una moción "indigna basada en una 'fake news'.

Ahora, con el Open Arms, han dejado ver que lo que oculta "su máscara de solidaridad es un utilitarismo político", ha afirmado, ya que como no podían usarlo en su beneficio "el barco se fue a la deriva".

Así, considera que los socialistas "orillaron la legalidad y olvidaron la humanidad" ante esta crisis.

Y ha concluido aseverando que el caso del Open Arms demuestra que los socialistas "no tienen, ni siquiera en régimen compartido, el dominio de la cabeza, ni corazón ni cabeza", tras recordar la frase de Valéry Giscard d'Estaing a François Mitterrand de que la izquierda no tiene "el monopolio del corazón".