El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha calificado de "inmenso despropósito público" el juicio del 1-O en el Tribunal Supremo, que este miércoles ha quedado visto para sentencia, y ha apelado a los catalanes a responder desde el ejercicio del derecho de autodeterminación.

En una declaración institucional desde la Delegación de la Generalitat en Madrid tras finalizar la última vista, ha insistido en su compromiso con llevar Cataluña a la independencia y en reivindicar el 1-O, concluyendo: "Yo también estoy convencido de que lo volveremos a hacer".

El presidente catalán se ha comprometido a buscar una "unidad estratégica" del soberanismo catalán para dar respuesta al juicio, una unidad que permita volver a situar la autodeterminación como el objetivo inmediato del Govern y la sociedad catalana.

"La respuesta a la sentencia no puede ser ninguna otra que la afirmación de un derecho que no pertenece a un presidente, a un Govern ni tampoco a un parlamento concreto, sino que pertenece a todo un pueblo y que, por lo tanto, es irrenunciable", ha concluido.

Torra ha dicho que, tras la aplicación del 155 y la celebración del juicio, hay que recuperar "el hilo de la historia", y esto pasa por buscar una unidad de los defensores de la libertades y de los derechos civiles, de los políticos y de los ciudadanos.

Torra ha asegurado que el 1-O fue "el acto de desobediencia civil más importante que se ha hecho en Europa", y ha considerado que de allí surgió un mandato para la creación de un Estado catalán que sigue vigente y que hay que aplicar.

"Deriva autoritaria"

También ha cargado contra el Estado por considerar que "ya hace mucho tiempo que perdió el respeto por la democracia, la separación de poderes y los derechos fundamentales", y ha asegurado que su Govern así buscará elevarlo a la esfera internacional.

"Es la hora también de hacer escuchar este clamor de justicia por todo el mundo. Que sepa el Estado que dedicaremos toda nuestra fuerza y energía a denunciar la vulneración de derechos y su deriva autoritaria", ha anunciado el presidente.

Torra ha repasado al menos una frase de los alegatos finales de todos los encausados del juicio, excepto del exconseller Santi Vila, que dimitió del Govern de Carles Puigdemont horas antes de que el Parlament declarara la república el 27 de octubre de 2017.

Por ejemplo, el presidente ha evocado las palabras de Oriol Junqueras apelando a que "hay que devolver el tema a la política, a la negociación y al acuerdo", o las de Joaquim Forn asegurando que solo desde el diálogo político se resolverá el conflicto.

Torra ha pedido que las palabras de los encausados lleguen a "todos los demócratas de España, desde los barrios más humildes a los palacios de poder", ya que ha asegurado que ninguno de ellos puede tolerar una injusticia tan descomunal como, a su parecer, es la situación actual.

De sentencia a sentencia

El presidente ha interpretado que el proceso soberanista empezó en 2010 con la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut y ha augurado que se puede llegar a "culminar" con el próximo fallo del Tribunal Supremo sobre el 1-O.

"Mi compromiso ha sido y es trabajar desde el primer momento para que Cataluña se convierta en un Estado independiente. No nos podemos permitir malbaratar el camino recorrido. Ahora es la hora del país", ha concluido.

Miles de personas piden en Barcelona la anulación del juicio del 'procés'

Mientras, unas 25.000 personas, según la Guardia Urbana, han participado este miércoles en la concentración convocada por las fuerzas soberanistas en la plaza Catalunya de Barcelona, para reclamar la "anulación" del juicio del 'procés' celebrado en el Tribunal Supremo.

En la concentración, impulsada por JxCat, ERC, la CUP, la ANC y Òmnium Cultural, con el apoyo además de los comunes, se ha leído un manifiesto unitario con el título "Libertad: la autodeterminación es un derecho", en el que se denuncia que el juicio del 'procés' "ha sido un escarnio, un atentado a la democracia y a los derechos civiles y políticos".

El manifiesto, leído por diversas personalidades, reclama la "anulación de este juicio", porque puede suponer un "punto de inflexión en la historia: si la sentencia no es absolutoria, creará jurisprudencia y marcará un precedente que pondrá en peligro todos los movimientos sociales".

Algunos de los asistentes a la movilización -en la que ha participado la activista Tamara Carrasco- exhibían pancartas con lemas como "Ni un paso atrás", "Lo volveremos a hacer" y exclamaban "No son presos, son rehenes", "No es un juicio, es una venganza", "Libertad presas políticas" o "Unidad".

A la concentración han acudido numerosos representantes de JxCat, ERC y la CUP -además de los comunes-, entre ellos el presidente del PDeCAT, David Bonvehí, que ha afirmado que "este juicio ha sido claramente una farsa con gran vulneración de derechos".

El alcaldable de ERC por Barcelona, Ernest Maragall, ha explicado su "doble sensación", por "la ignominia del juicio farsa" y el "orgullo" que ha sentido al escuchar a los acusados.

El diputado de la CUP en el Parlament Carles Riera ha reiterado la idea de que el juicio que este miércoles ha terminado en el Supremo es un "un juicio farsa" y ha subrayado la "valentía y dignidad de los presos".

En el acto también ha participado la presidenta del grupo parlamentario de Catalunya En Comú Podem, Jéssica Albiach, que ha explicado que se ha unido a la concentración "para dar apoyo a los presos y presas políticos en un juicio infame que nunca tendría que haberse producido".

Por su parte, la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, ha afirmado que el "único objetivo" del juicio del 'procés' es "acabar con el movimiento independentista catalán" y ha considerado "más necesaria que nunca" la unidad del independentismo.