Las obras para acondicionar la cripta donde el Gobierno español quiere enterrar al exdictador Francisco Franco se llevan ya a cabo en el cementerio municipal de El Pardo, un barrio de la periferia de Madrid, informaron fuentes conocedoras de los trabajos.

Las labores están siendo realizadas por operarios contratados por el Gobierno, ya que el Estado es el titular del panteón, donde ya se encuentra enterrada desde 1988 la esposa de Franco, Carmen Polo.

El objetivo del Ejecutivo es que los restos de Franco sean exhumados el próximo 10 de junio de su actual lugar de enterramiento, el monumento del Valle de los Caídos, a unos 55 kilómetros al noroeste de Madrid, para volver a ser enterrados en esa cripta.

El panteón pasó a ser propiedad del Estado español el pasado 11 de mayo, según el procedimiento legal establecido para la exhumación, un protocolo que retiró la titularidad al organismo público Patrimonio Nacional.

Sin embargo, la familia Franco sigue insistiendo en su objetivo de que el nuevo enterramiento tenga lugar en la cripta de la catedral de la Almudena (Madrid), ya que considera que es el lugar más seguro, con un "nivel de riesgos sensiblemente inferior" al del cementerio de El Pardo, según un informe elaborado por expertos en seguridad y presentado este miércoles.

La familia ha presentado un nuevo recurso al Tribunal Supremo contra las decisiones del Gobierno español, aunque esa corte aún no se ha pronunciado.

Franco (1892-1975) fue enterrado tras su muerte en la basílica del monumento del Valle de los Caídos, construido a instancias del dictador en una zona de sierra al norte de Madrid.

Ese monumento alberga los restos de varias decenas de miles de fallecidos durante la Guerra Civil de 1936-1939 y en los años posteriores.