El presidente catalán, Quim Torra, ha asegurado hoy que la cárcel preventiva de Carme Forcadell es la "metáfora de nuestra prisión colectiva", durante el acto de entrega de la Medalla de Oro a la expresidenta del Parlament que, en una carta, ha denunciado "la acción represiva de un Estado demofóbico".

Carme Forcadell, el exvicepresidente del Tribunal Constitucional Carles Viver i Pi-Sunyer y el estudio de arquitectos RCR -premio Pritzker 2017- han sido galardonados en el Salón Sant Jordi del Palau de la Generalitat con la máxima distinción honorífica que otorga el Govern para reconocer las personas y colectivos que con su aportación han prestado servicios relevantes a Cataluña.

En su intervención, Torra ha elogiado a los premiados, que "han imprimido carácter a la identidad colectiva nacional" catalana bajo los pilares de "anhelo de libertad, cultura y talento", sobre los cuales quiere construir "la nueva Cataluña republicana".

Precisamente, a Viver i Pi-Sunyer le ha atribuido el "valor del talento", así como su "rigor profesional e intelectual"; a RCR, el valor de la "cultura en sentido amplio y radical", mezclando "creatividad y equilibrio"; y a Forcadell, el ideal de "libertad", que es "democracia, determinación y verdad".

"Su prisión es la metáfora de nuestra prisión colectiva y las mentiras sobre las que se fundamenta", ha dicho Torra, que ha denunciado que se halle "vergonzosamente" encarcelada "sin juicio ni garantías", por "haber ejercido con pulcritud democrática su trabajo, permitiendo todos los debates en el Parlament".

Torra ha querido enviar además un "recuerdo especial a los presos políticos y exiliados, con conciencia de saberlos parte de una larga cadena de esfuerzo y lucha".

El decreto de concesión de la Medalla de Oro pone en relieve la "destacada trayectoria" de Forcadell "en la defensa de los derechos humanos, el parlamentarismo y las libertades fundamentales", y su "fomento de la lengua catalana y la igualdad efectiva de género".

Los cánticos de "libertad" de la mayoría de asistentes y un lazo amarillo situado sobre una silla vacía ha servido para homenajear a la expresidenta del Parlament, quien se encuentra en prisión preventiva en el marco de la causa judicial contra el "procés".

Es por ello que ha sido su esposo, Bernat Pegueroles, el encargado de recoger la medalla en su nombre y leer una carta escrita por ella desde la cárcel.

En ella, Forcadell ha denunciado la "acción represiva de un Estado demofóbico" que "menosprecia derechos fundamentales" y que "no ha dudado en pisotear derechos civiles y políticos de una parte de su población con la única intención de castigarla por haber osado tener objetivos políticos que simplemente reclaman más justicia, democracia y progreso social".

Ha alertado en su misiva de la irrupción de partidos de "extrema derecha" que "están consiguiendo implementar un relato en marcos mentales y la agenda política" contra los derechos de las mujeres, los refugiados, las minorías y los avances sociales ,o que "defienden la prisión para silenciar a quienes piden más democracia, libertad o tenemos el valor de denunciar su deriva autoritaria".