El presidente canario, Fernando Clavijo, y el de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, han supervisado hoy los preparativos del reloj de la Puerta del Sol que mañana, por primera vez en su historia, se retrasará una hora para ajustarse al huso horario de las islas y dar también las "campanadas canarias".

En una comparecencia ante los medios, acompañados del relojero Jesús López Terradas, Clavijo se ha mostrado convencido de que mañana "el kilómetro cero convertirá esta mágica noche en una embajada de Canarias" y ha explicado que el espectáculo podrá empezar a disfrutarse a partir de las 00:04, hora peninsular, hasta que suene el carillón previo a las campanadas canarias.

Clavijo ha avanzado que la iniciativa, que se dio a conocer el 5 de octubre, fue un acontecimiento mediático y en un solo día el anuncio alcanzó más de seis millones de espectadores en televisión, 50 millones de impactos en internet, fue publicado por 135 medios digitales y por 50 periódicos en papel, al día siguiente.

Por su parte, el presidente madrileño ha considerado que el reloj de la Puerta del Sol y el acto de mañana también simboliza "el entendimiento, la concordia", "la voluntad de continuar siendo un país unido y solidario y la colaboración de las comunidades. Y eso debería ser lo habitual".

Garrido ha recordado que el reloj, fabricado en 1866 por José Rodríguez Losada, se ajustará "momentáneamente" al huso de Canarias y la ciudad de Madrid se convertirá, una vez más, "en el rompeolas de todas las Españas".

"Nunca como mañana tendrá tanto sentido la frase 'el tiempo vuela' o 'tempus fugit'", en latín, ha dicho el presidente madrileño que ha valorado el esfuerzo del relojero y las personas que le acompañarán mañana para que "todo funcione correctamente".

Garrido ha explicado que desde las 00:04 (hora peninsular) y hasta que suene nuevamente el carillón para dar la campanada canaria, se proyectará un vídeo sobre la fachada de la Real Casa de Correos en el que se promocionará el patrimonio de las islas y de la ciudad de Madrid.

El presidente ha explicado que quince minutos después de que se den las campanadas en la hora peninsular, el relojero retrasará una hora las manecillas "para los amigos de las islas canarias".

Y una vez hecho esto y tras las campanadas canarias, "el reloj volverá a su horario habitual" ha explicado.

Por su parte y en declaraciones a los medios tras las comparecencias de los presidentes autonómicos, el relojero Jesús López Terradas ha explicado que "a las doce y cuarto retrasamos el reloj a las once y cuarto, volvemos a esperar que sean las doce y otra vez lo mismo, caerá la bola y sonarán los cuartos, y en ese intervalo también se cambia la sonería porque si no en lugar de las doce, daría la una".

López Terradas ha reconocido que es "bastante trabajo", un esfuerzo extra que da por bueno ya que se trata "sólo de una noche y la gente está contenta. Es una noche de mucha alegría".

Además y entre risas, el relojero de la Puerta del Sol ha comentado que si alguien no se ha comido las uvas la primera vez, tendrá una segunda oportunidad.