Activistas de Greenpeace han colgado este lunes un meme gigante en el Arco de la Victoria de Moncloa, en Madrid, para exigir al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ejemplaridad en el respeto a los derechos humanos y el fin de la venta de armas para matar civiles.

"Pedro, no te pases los derechos humanos por el arco del triunfo. No más armas para matar civiles", reza el cartel gigante en el que aparece la conocida foto de Sánchez con gafas de sol en el avión oficial.

Escaladores de la organización ecologista han colgado a primera hora de esta mañana el meme de 240 metros, coincidiendo con la conmemoración del Día Internacional de los Derechos Humanos y el 70 aniversario de su Declaración Universal.

Horas más tarde, sobre las 11:30 horas, la Policía Nacional junto a Bomberos del Ayuntamiento de Madrid han procedido a retirar la pancarta con una grúa tras haber desalojado a los activistas.

Greenpeace exige así al presidente del Gobierno "un compromiso sin fisuras" ante el retroceso mundial en la protección de los derechos humanos y le cuestiona su "inacción" en el cese de la exportación de armas que pueden ser usadas para vulnerar el derecho internacional.

Para la organización resulta especialmente preocupante el caso de la venta de armas a los países de la coalición saudí que participan en el conflicto de Yemen, por lo que exige en un comunicado al Ejecutivo que acabe con los envíos de armamento a Arabia Saudí y asuma sus obligaciones derivadas de la normativa en materia de comercio de armas.

"En un día como hoy el Gobierno debe dar ejemplo de sus compromiso con los derechos humanos", dice el director de Greenpeace España, Mario Rodríguez, que advierte de que "no todo vale" y de que "para avanzar en calidad democrática hay que demostrar firmeza y determinación en el respeto a los derechos humanos".

Según la organización ecologista, el Ejecutivo tiene la obligación "legal y moral" de denegar las solicitudes de autorización de venta de armas a Arabia Saudí y revocar las licencias ya autorizadas mientras subsista un "riesgo sustancial" de que las armas se puedan usar para cometer o facilitar violaciones graves de los derechos humanos o del derecho internacional.