La ONG Proactiva Open Arms está estudiando comprar un barco para continuar con su labor de salvamento de refugiados en el Mediterráneo, ante el hecho de que la confiscación de su buque insignia en el puerto italiano de Pozzallo pueda alargarse mucho tiempo.

Fuentes de la organización han explicado a Europa Press que en los próximos días empezarán a ver algún navío que podrían comprar, gracias a los apoyos que reciben, y que probablemente se tratará de un barco que está activo y que estaría preparado para zarpar.

El barco retenido en Sicilia, el Open Arms, fue una donación y requirió una inversión para ponerlo en marcha, para la que iniciaron una campaña de micromecenazgo, pero esta vez se servirán de las donaciones que reciben, que usan también para los gastos legales y para mantener la tripulación que está en Italia.

La organización tiene actualmente otro barco, el velero Astral, fruto de una cesión en verano de 2016 y que se dedica sobre todo a hacer campañas de sensibilización, pero que también está "listo y preparado" por si necesita salir; anteriormente alquilaron el Golfo Azzurro, un barco que usaron desde enero a agosto del año pasado.

El Open Arms lleva bloqueado en Pozzallo desde el 18 de marzo, cuando fue retenido a petición de la Fiscalía, y este martes el juez de instrucción de Catania, Nunzio Sarpietro, aceptó que se mantuviera retenido, pero consideró que solo subsiste el delito de inmigración clandestina, y no el de asociación para delinquir, y del que el fiscal de Catania, Carmelo Zuccaro, acusaba a la ONG.

La entidad de Badalona (Barcelona) ha alertado de que las personas siguen saliendo de países como Libia y huyendo de conflictos, por lo que ven necesario volver al mar a salvarlos.