Ciudadanos ha logrado una histórica victoria en unas elecciones catalanas al convertirse en la primera fuerza no nacionalista que gana en escaños (37), lo que no evita una mayoría parlamentaria del bloque independentista, en el que la lista de Carles Puigdemont (JxCat) ha superado a la de ERC de Oriol Junqueras.

Con casi el 100% de los votos escrutados, el partido de Inés Arrimadas se consolida como claro ganador, con el 25,36 % de los sufragios y 36 escaños, dos más que JxCat, el partido de Carles Puigdemont, que se queda con 34 representantes y el 21,66 % de los votos, por delante de ERC, que obtiene 32 diputados.

El PSC de Miquel Iceta no ha logrado cumplir con sus expectativas y se ha tenido que conformar con 17 escaños, uno más que hace dos años, pese a que los sondeos le daban por encima de 20.

Los comunes, el PP y la CUP tampoco han conseguido los resultados esperados y han retrocedido todos ellos con relación a los anteriores comicios, con 3 y 4, respectivamente.

La victoria de Ciudadanos, que ha superado el millón de votos y ha aventajado en unos cien mil a JxCat, confirma los pronósticos marcados por los sondeos, que lo situaban como el primer partido.

Arrimadas: "Por primera vez en Cataluña ha ganado un partido constitucionalista"

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Fiesta en Ciudadanos al ser el partido más votado. Vídeo: Agrencia ATLAS/Foto: Reuters

Sólo el PSC de Pasqual Maragall llegó a superar en votos a los nacionalistas en 2003, aunque no en escaños, cuando la CiU de Jordi Pujol y Artur Mas quedó desbancada finamente del Govern tras ganar en diputados a los socialistas. El PSC acabó gobernando al sumar con ERC e ICV-EUiA en el primer tripartito catalán.

El independentismo revalida el 47% de votos

Las fuerzas independentistas -Junts per Catalunya, ERC y la CUP- han revalidado el 47% de los votos que consiguieron en las elecciones del 27 de septiembre de 2015 y ha superado la barrera de los dos millones de sufragios.

Junts per Catalunya se sitúa en el 21,71% de los sufragios, ligeramente por encima de ERC (21,43%), mientras que la CUP se queda en un 4,44%, lo que, en conjunto, se traduce en una nueva mayoría absoluta con 70 escaños independentistas.

Sumadas, las tres listas independentistas alcanzan el 47,58% de los votos, casi el mismo porcentaje que el 47,8% que obtuvieron Junts pel Sí -coalición que agrupaba a la antigua CDC y ERC- y la CUP, pese al aumento de participación, que se eleva hasta casi el 82%.

De este modo, JxCat y ERC pueden lograr la investidura del nuevo presidente de la Generalitat si consiguen el voto a favor de la CUP para alcanzar la mayoría absoluta en primera votación, o bien su abstención para asegurarse la mayoría simple en una segunda votación.

Puigdemont: "La República catalana ha ganado a la Monarquía del 155"

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Puigdemont: "La República catalana ha ganado a la Monarquía del 155". Vídeo: Agencia ATLAS/Foto: EFE

En 2015, Junts pel Sí consiguió el 39,59% de los votos, pero por separado Junts per Catalunya y ERC han superado ese porcentaje hasta alcanzar el 43,14%, en detrimento de una CUP que ha caído del 8,21% al 4,44%.

En el bloque constitucionalista, Ciudadanos (25,35%), el PSC (13,86%) y el PPC (4,22%) suman un total de 43,43%, por encima del 39,11% que acumularon hace dos años, mientras que los comunes, no alineados en ningún bloque, han caído del 8,94% de 2015 al 7,41%.

Cs ha conseguido el mayor número de votos y escaños, con 1.088.629 votos y 37 escaños, frente a los 736.364 votos de 2015 (17,9%).

El PSC ha obtenido 595.437 votos (13,86%), 72.154 más que hace dos años (12,72%), mientras que el PP ha conseguido 181.769 apoyos (4,23%), frente a los 349.193 votos de 2015 (8,49%).

Sobre posibles acuerdos entre los tres partidos, Iceta repitió durante la campaña que no votaría a favor de investir a Inés Arrimadas como presidenta aunque Cs fuera el partido más votado, aunque la suma de los tres partidos no hace posible la formación de Govern.

Participación histórica

La participación en las elecciones catalanas ha alcanzado un récord histórico al alcanzar casi el 82% del censo, en unos comicios caracterizados por una fuerte polarización del electorado.

Esta cifra supone un aumento de más de seis puntos con respecto a las autonómicas de 2015, cuando ya batió las marcas anteriores con el 74,95 por ciento.

Esta gran movilización electoral, que ya habían augurado la mayoría de las encuestas, ha logrado batir incluso el récord de participación entre todas las contiendas electorales celebradas en España, el 79,9% de las generales de 1982, cuando triunfó el PSOE liderado por Felipe González.