La ajustada victoria de Pablo Iglesias en la consulta de Podemos sobre las reglas de juego de su próxima Asamblea Ciudadana ha servido para reforzar al sector del número dos, Íñigo Errejón, que ahora ya sabe que está respaldado por la militancia para dar la batalla por sus ideas en Vistalegre II.

La propuesta 'Podemos para todas' y el sistema de votación 'Desborda', diseñado por el secretario de Organización, Pablo Echenique, defendida por Iglesias, ha ganado la consulta por la mínima, con el voto de 40.830 (un 41,57 por ciento) de los casi 100.000 militantes que han participado.

Pero los 'errejonistas', firmantes del manifiesto 'Recuperar la ilusión', han logrado el 39,13 por ciento de los votos (38.419 votos), sólo 2.411 menos que Iglesias, con lo que se ven reforzados para mirar de "igual a igual" al sector 'pablista' en su próximo congreso.

En Vistalegre II, en cualquier caso, se impondrán las normas defendidas por Pablo Iglesias y se discutirán y votarán de forma conjunta los proyectos políticos y las candidaturas.

Lo que sigue sin estar en discusión es el liderazgo de Iglesias. Lo ha dicho así el propio Errejón en rueda de prensa para valorar los resultados de esta consulta que demuestran, a su juicio, que en el partido morado hay "dos proyectos equilibrados" y "complementarios", que deben "entenderse".

A Errejón se le ha visto hoy con fuerza para apelar a abandonar la lógica del "todo o nada" y para confirmar que asume el reto y el desafío de defender su proyecto político en la próxima asamblea ciudadana.

"No pasa nada", ha dicho, porque en el partido se confronten proyectos, ideas y modelos organizativos y, además, el partido está "mejor" después de esta consulta que cree que ha mostrado "diversidad, pluralidad, fraternidad y capacidad de construcción".

Resultado sorpresa para Iglesias

En el sector de Iglesias no se esperaban este resultado y pensaban que la alta participación (casi 100.000 de los más de 400.000 militantes) corría a su favor, pero esto les ha demostrado que nadie puede conocer ni predecir el voto de los inscritos en Podemos.

Para Errejón el mandato de la consulta es el "entendimiento" y también para el secretario general, quien se ha comprometido a dejarse la piel y buscar acuerdos con el resto de corrientes del partido y lograr integrar en un mismo equipo a dirigentes como Errejón o el eurodiputado Miguel Urbán, de Anticapitalistas.

Los Anticapitalistas eran la tercera pata de la consulta, y su modelo ha sido respaldo por 10.313 inscritos (un 10,50 por ciento), lo que también revela que la fuerza del sector de la secretaria general de Podemos Andalucía, Teresa Rodríguez, o el alcalde de Cádiz, José María González, Kichi, tiene un techo no muy alto.

No obstante, cuando Iglesias habla de conseguir la unidad y de integrar, les menciona a todos, a Urbán y a Errejón, a quienes sigue poniendo en un mismo plano en su objetivos de llegar a acuerdos y con quienes ha mantenido hoy mismo una conversación "fraternal", que han saldado con la voluntad de "entendimiento".

El líder de Podemos cree que lo que la militancia está "pidiendo a voces" es el acuerdo y por ello se ha comprometido a asumir la responsabilidad de buscarlo en un debate abierto para definir qué Podemos necesita España.

Iglesias ha hecho hincapié en que esta consulta era únicamente para decidir una cuestión metodológica y un sistema de votación, pero ha servido también para que por primera vez midan sus fuerzas entre la militancia los dos principales dirigentes del partido en un duelo que deja totalmente abierta la discusión política en la Asamblea Ciudadana.

De momento, el liderazgo sigue estando claro: Pablo Iglesias ha reconocido que le produce cierto apuro tener "el apoyo de todos los sectores del partido" para seguir siendo secretario general, lo que para él es un "honor y orgullo", que le obliga a trabajar por el acuerdo.

Y "sí es posible trabajar en un equipo conjunto", "pero, si eso no fuera posible -ha continuado-, estoy orgulloso de que serán los militantes votando" los que decidan el rumbo.