Me hubiera salido más barato viajar a Murcia y darle una bofetada a ese chaval", declaraba ayer entre indignada y desesperenzada Ithaisa Suárez, la madre de Yéremi Vargas, el niño desaparecido el 10 de marzo de 2007 mientras jugaba con sus primos en Santa Lucía. La sentencia condenatoria a su marido -en segundas nupcias- Jonathan Guisado en el juicio celebrado ayer en los juzgados de San Bartolomé de Tirajana le supondrá a este matrimonio el pago de "900 euros mensuales durante unos cuatro meses, las costas judiciales y al abogado de esa persona", añadió Suárez.

Pero la progenitora del niño aún sin localizar no cesa en su intención de mantener la lucha por su hijo. Hoy se reúne con el delegado del Gobierno en Canarias y con el coronel de la Guardia Civil.

La persona en cuestión es un joven de Murcia que el pasado año, según recordó Ithaisa Suárez, "colgó en Internet burlas sobre la desaparición e hizo llamadas a mi casa e incluso cuando estaba en el hospital a punto de dar a luz a mi hija". Los autores de las vejaciones e insultos sufridos por la familia de Yéremi Vargas se localizaron en la población murciana de Puerto Lumbreras y se dio cuenta por parte de Guisado de la identidad de los implicados. Frases como sabemos quien tiene el cadáver de Yéremi o Yéremi juega bien al escondite pusieron a los familiares del pequeño todavía más tristes, pero al final han sido ellos los denunciados.

La razón es que la aparición en los medios de comunicación de sus comentarios lo denunció uno de los jóvenes como un perjuicio para él. El juzgado de San Bartolomé de Tirajana le dio la razón y ahora los agraviados se han convertido en los culpables de atentar contra el honor del internauta.

Pero ni Jonathan ni Ithaisa se rinden y van a seguir plantando batalla sobre este asunto. Hoy, a partir de las 9.30 horas, serán recibidos por el delegado del Gobierno en Canarias, Enrique Hernández Bento, y por el coronel de la Guardia Civil. "Queremos que nos expliquen cómo se ha podido llegar a esta situación, ya que en el juicio nos enteramos que la denuncia que presentamos en 2013 se había archivado y no se nos informó", destacó la madre de Yéremi.

La reunión con el representante del Estado en el Archipiélago y del responsable del instituto armado es la oportunidad que tienen la familia del menor desaparecido para expresar su sentir en este asunto, además de solicitar información de cómo se desarrolla la investigación. "Queremos saber cómo se está trabajando, qué nuevos datos podemos conocer".

Ithaysa asegura que se siente arropada por todo el mundo pese a los años transcurridos y que seguirá luchando siempre por Yéremi.