Artur Mas, que hoy ha llegado solo a la sede de CDC y sin los aplausos de otras ocasiones, está pendiente de la CUP para renovar al frente de la Generalitat, ya que con los 62 diputados logrados Junts pel Sí necesita del apoyo de al menos uno de los diez escaños de la formación anticapitalista.

Pero el líder de la CUP, Antonio Baños, siempre ha dicho que su formación jamás investirá a Mas presidente de la Generalitat, aunque tampoco pondrá en peligro la continuidad del proceso independentista, un difícil equilibrio que deberá decantarse en los próximos días o semanas.

Esta mañana, Antonio Baños ha reconocido que el plebiscito que su formación y Junts pel sí veían en estos comicios "no se ha ganado", por lo que descarta una declaración unilateral de independencia (Dui).

"La Dui iba ligada al plebiscito: no hemos ganado el plebiscito, luego no hay Dui", ha explicado en rueda de prensa sobre el resultado de los comicios junto a la diputada electa Anna Gabriel, y ha valorado que las candidaturas independentistas (JxSí y la propia CUP) no han llegado al 50% de votos.

Sin embargo, ha constatado que ambas listas sí vencen a los partidos claramente contrarios a la secesión; y ha aludido implícitamente a Catalunya Sí Que Es Pot para decir: "Los votos a favor de la independencia son más que los votos en contra, y además hay una amplísima bolsa de votos a favor de cambiar las cosas y en contra del statu quo".

Ante la negativa de la CUP a apoyar a Artur Mas, según diferentes fuentes de los partidos catalanes, existe la posibilidad de que se explore la posibilidad de que el president sea otra persona que Mas, como el cartel electoral de Junts pel Sí, Raül Romeva (exICV), o incluso el líder de ERC, Oriol Junqueras.

La sesión de investidura del nuevo presidente de la Generalitat deberá celebrarse, si se agotan todos los plazos, el 9 de noviembre, una fecha simbólica ya que se cumpliría justamente un año de la consulta alternativa sobre la independencia de Cataluña.

La sesión constitutiva del Parlament deberá ser convocada por el actual presidente catalán, Artur Mas, para que tenga lugar dentro de los 20 días hábiles posteriores a las elecciones del 27S, por lo que el 26 de octubre es la fecha límite.

Debate de investidura

Una vez constituido el Parlament de la nueva legislatura y escogida la presidencia de la cámara, así como el resto de miembros de la Mesa, en los diez días hábiles posteriores deberá celebrarse el debate de investidura del nuevo presidente de la Generalitat, lo que sitúa el 9N como fecha máxima.

Corresponde a la persona que ostente la presidencia del Parlament abrir consultas durante estos días con los líderes de los partidos que hayan obtenido representación parlamentaria, para explorar quién puede contar con el apoyo mayoritario de la cámara.

Junts pel Sí ya ha avanzado que propondrá a Mas, que figura como número cuatro de una lista que encabeza Raül Romeva, para continuar al frente del Govern.

Este mismo lunes, el portavoz de ERC, Sergi Sabrià, ha asegurado que su partido mantiene la apuesta por que Artur Mas sea investido presidente y ha expuesto que no lo cambiará por el hecho que la CUP tenga la llave de la investidura y no le guste Mas: "Es un proceso que no va de nombres, necesitamos de todos".

En rueda de prensa tras la reunión de la dirección del partido, ha recordado que el pacto de Junts pel sí incluye volver a investir Mas presidente y esto no variará: "Junts pel sí responde a una voluntad de una investidura. No ha cambiado en ningún caso de día de hoy".

Sabrià ha expuesto que Junts pel sí --la coalición en la que participan ERC y CDC-- apuesta por un "gobierno de concentración" para aplicar el mandato democrático independentista que, a su juicio, salió este domingo de las urnas, y ha invitado a formar Govern a la CUP y también a Catalunya Sí Que Es Pot.

Sabrià ha defendido que existe total voluntad de acuerdo de Junts pel sí hacia la CUP, pero ha avisado al partido de Antonio Baños de que todo el mundo deberá estar dispuesto a moverse: "Es el momento del diálogo. Si alguien no se mueve y se clava allí donde está el consenso será muy difícil".

Más allá de los resultados del 27S, el escenario que deja las elecciones catalanas se presenta complejo, y no sólo por la llave de la gobernabilidad que tiene ahora mismo la CUP, sino también por la heterogeneidad de Junts pel Sí, una candidatura independentista liderada por un exdirigente de ICV, Raül Romeva, y que engloba a CDC, ERC e independientes.

La candidatura unitaria de Junts pel Sí ha conseguido, con un total de 62 escaños a la espera de que el escrutinio llegue al 100%, es la suma de 30 diputados de CDC, 21 de ERC y 11 independientes.

Asimismo, la candidatura conjunta había situado a cinco independientes en los primeros siete puestos de la lista por Barcelona: Raül Romeva como número uno, seguido de Carme Forcadell y Muriel Casals y, por detrás de Artur Mas y Oriol Junqueras, también Eduardo Reyes y Oriol Amat.

Balance positivo

ERC han mantenido el mismo balance positivo de los resultados electorales que ya hizo la noche de este domingo: "ERC está viviendo el momento que ha estado esperando desde hace 80 años. La Cataluña autonómica está enterrada, próxima estación: independencia".

Sabrià también ha dicho que Junts pel sí no es partidaria de aceptar un referéndum negociado con el Estado, y ha defendido que ya existe un mandato claro para la independencia de Cataluña: "El plebiscito ha sido este y ya está hecho. Este referéndum lo damos por hecho".

Elecciones generales

Sabrià no ha precisado si ERC apostará por repetir la alianza Junts pel sí de cara a las elecciones generales, que están previstas para el mes de diciembre, y aunque no tiene calendario para abordar está cuestión, ha admitido que "tiempo no sobra" para tomar una decisión final.

El portavoz republicano ha defendido que la primera experiencia de CDC y ERC formando Junts pel sí ha sido exitosa y ha sostenido que "la prensa internacional" detecta una clara victoria de los partidarios de la independencia.