Los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIES) funcionan como "verdaderas cárceles", donde se produce una violación masiva de derechos humanos, a pesar de que la legislación vigente determina que estos establecimientos no tienen un carácter penitenciario.

Así se recoge en las conclusiones en el informe "Situación actual de los CIES en España y su adecuación al marco legal vigente", que se ha presentado hoy, elaborado para la ONG jesuita Pueblos Unidos por las clínicas jurídicas de las Universidades de Icade, Valencia, Barcelona y Valladolid.

La coordinadora del proyecto, Amalia Hernández Sendín, ha señalado que la Ley Orgánica de Extranjería establece que las personas ingresadas en los CIES tienen únicamente restringido su derecho ambulatorio, por lo que se debería respetar el resto de sus derechos fundamentales que, en muchos casos, les son vulnerados.

Hernández Sendín ha destacado que, entre los aspectos que no se adecúan a la legislación vigente, algunas instalaciones, especialmente la de Algeciras, cuentan con deficiencias o deterioros que pueden poner en riesgo la salud y la seguridad de los internos.

La investigación también llama la atención sobre la falta de implementación de servicios sanitarios permanentes, que, en la mayoría de los casos, se limita a prestar una atención sanitaria básica y no especializada.