E l PSE y el PP vasco rechazaron ayer las declaraciones del lehendakari, Juan José Ibarretxe, que aseguró que «intentará» cumplir en esta legislatura su palabra «de que este proceso iba a acabar con una consulta democrática».

En una entrevista ofrecida ayer por el periódico guipuzcoano Diario Vasco, Ibarretxe alertó sobre «la delicada situación» política del País Vasco y dijo que los terroristas «pueden volver a hacernos sufrir», pero aseguró que, «haga lo que haga ETA, daré la palabra al pueblo en esta legislatura».

Ibarretxe expuso que tras el atentado de Barajas la «situación es muy delicada» en los partidos vascos y, especialmente, en Batasuna, y que ETA junto al resto de la izquierda abertzale sabe que aquella bomba, «además de matar a dos personas inocentes, constituyó un enorme error que puso patas arriba el proceso de paz».

Así, lamentó que, en lugar de trasladar a la sociedad que la violencia «se ha acabado», ETA evidencia que «está organizando comandos, como es el caso del Comando Donosti».

Sin embargo, el lehendakari pide a los vascos que no pierdan la esperanza porque «a pesar de que ETA está ahí y puede volver a atentar, estoy convencido de que la etapa de la violencia está próxima a su fin de una vez y para siempre».

Ibarretxe dijo que «no podemos estar esperando lo que haga ETA», por lo que anunció que trabajará para cumplir la palabra que dio a la sociedad vasca, cuando aseguró que «el proceso iba a acabar en una consulta democrática» y vaticinó que podría realizarse en esta legislatura.

Nacionalismo radical El secretario general del PSE-EE, Patxi López, acusó al lehendakari de estar cada vez «más desfasado, más en el pasado y más alejado de la sociedad vasca» al reivindicar de nuevo una consulta y su plan que «sólo satisface al nacionalismo más doctrinario y radical».

López, que intervino en la presentación de la candidatura socialista al Ayuntamiento de Vitoria para las elecciones del 27 de mayo, arremetió contra el lehendakari que «otra vez ha vuelto a sacar su raca raca, su plan para dar otra vuelta a la imposición, a la división y al enfrentamiento».

Calificó estas propuestas de «obsesiones identitarias de quienes siguen reivindicando proyectos del pasado felizmente caducados» porque la sociedad «está en el tiempo de sumar y no de dividir y quiere hacer Euskadi entre todos».

Por su parte, el secretario de los socialistas alaveses y candidato a Diputado General de esta provincia, Txarli Prieto, dijo al PNV que «se metan el Plan Ibarretxe por donde les quepa».

Por su parte, el secretario general del PP vasco, Carmelo Barrio manifestó que el lehendakari «está hoy liderando la debacle, hablando de sus obsesiones nacionalistas, de su plan, de su consulta, poniéndola como referencia de esta legislatura cuando está muy claro que el nacionalismo resta».

El dirigente del PP vasco precisó que es el nacionalismo el que está logrando poner Euskadi «a la cola» y se dirigió al PSE para preguntarle si es «con estos con quienes quiere pactar».