El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, asegura que no hay "ni un sólo país en la Unión Europea dispuesto a aceptar una declaración unilateral de independencia de Cataluña" y, en el caso de una "inimaginable" secesión pactada, "muchos países la vetarían".

En una entrevista que publica hoy el diario "El Mundo, García-Margallo señala que este veto se explicaría porque muchos países de la comunidad internacional piensan que "fragmentar lo que está unido es un mal paso".

El titular de Exteriores relata que si se escinde uno de los estados de la Unión Europea "hay un estado nuevo y, como tal, está excluido de la Unión. Tendría que solicitar la adhesión, que debe ser aprobada por unanimidad. Cataluña, por tanto, tendría que ponerse a la cola y esperar el turno y el veredicto de los 27. Mientras, estaría fuera del mercado interior, sujeto a aranceles, fuera de las políticas estructurales y de la política agraria común".

A la pregunta de si el Gobierno teme que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, saque mayoría absoluta y entienda las elecciones catalanas como un plebiscito para convocar un referéndum, García-Margallo subraya que "la convocatoria de un referéndum ilegal lo es igual con mayoría absoluta o sin ella. Simplemente no se puede hacer y no se hará".

También avanza que no cree que ningún Gobierno catalán esté dispuesto a llegar a una situación de "insumisión, rebeldía o incumplimiento de la ley".