La presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, ha dicho que hoy es "un día muy triste para la democracia" después de que ayer el Tribunal Constitucional legalizara Sortu, y ha afirmado que "a lo mejor hay que empezar a pensar" en que el Constitucional se convierta en "una sala del Supremo".

Antes de intervenir en la sesión de control al Gobierno en la Asamblea, Aguirre se ha referido al fallo que dio a conocer ayer el Constitucional, un tribunal cuya existencia, ha dicho, hay que replantearse.

"Ha llegado el momento de plantearse muy seriamente por qué tiene que haber un Tribunal Constitucional nutrido de políticos que se llaman magistrados pero que no lo son, y si hay que hacer recortes a lo mejor hay que empezar a pensar que el TC sea una sala del Supremo", ha dicho.

La presidenta regional ha aseverado que es un día "muy triste para la democracia española" porque el TC ha decidido "enmendarle la plana" al Supremo "de nuevo" y legalizar Sortu, "un partido político que no ha querido condenar los asesinatos de ETA y se ha negado a pedir su disolución".

Aguirre se ha referido al hecho de que a la magistrada del Tribunal Constitucional Elisa Pérez Vera, encargada de redactar la sentencia sobre Sortu, fuera también en el pasado ponente de las resoluciones sobre el Estatuto de Cataluña y Bildu.

"¡Qué casualidad!", ha exclamado la presidenta, que ha añadido: "Hace año y medio que se sabía (que el Tribunal Constitucional debía resolver el recurso de Sortu contra la prohibición de inscribirse como partido político) y a mí me parece una vergüenza".