La victoria del historiador Alfred Bosch en las primarias organizadas por ERC para elegir al jefe de filas del partido en las generales ha obtenido el visto bueno de los partidos independentistas que rivalizan con la formación republicana, que ven en Bosch la posibilidad de formar un frente común en el Congreso.

Reagrupament, SI --ambas escisiones del partido republicano-- y Democràcia Catalana (DC) son partidarios de presentar una frente común en la Cámara Baja, algo prácticamente imposible si el ganador de las primarias hubiera sido el actual portavoz de ERC en el Congreso, Joan Ridao.

Instantes después de confirmarse el triunfo de Bosch y la elección de Oriol Junqueras como nuevo presidente del partido con el 92 por ciento de los votos de la militancia, Reagrupament tendió la mano a ERC para formar una coalición de cara al 20 de noviembre.

En un comunicado, el partido liderado por Joan Carretero --ex dirigente de ERC-- reveló conversaciones con el nuevo presidente para formar una candidatura unitaria, y se mostró convencido de que la victoria de Bosch allana el camino para sellar un pacto.

En la misma línea, SI ya se pronunció sobre la coalición incluso antes de que se celebrasen las primarias, y su diputado en el Parlament Alfons López Tena anunció "buena sintonía" con Bosch para llegar a un acuerdo.

Por su parte, DC, el partido de Joan Laporta, felicitó rápidamente a ERC por los triunfos de Junqueras y Bosch, pero su apoyo a una candidatura unitaria parece más complicado porque fija como condición que se incluya a CiU, algo que ni la propia federación nacionalista está dispuesta a aceptar.

Pese a la predisposición demostrada por los tres partidos, tras ratificarse este sábado su victoria como presidente, Junqueras ha centrado su discurso en apelar a la unidad de la que ha carecido ERC en los últimos años, y ha evitado hablar de frentes unitarios independentistas.

Tampoco ha aludido a la coalición Bosch, que sí se comprometió a trabajar en Madrid "con las manos libres" y defendiendo un proyecto netamente independentista que tenga como principales objetivos la secesión de Cataluña y la crisis económica.

Más allá de los propios partidos, los impulsores del manifiesto para una candidatura independentista unitaria a las elecciones generales --que cuenta con 4.500 adhesiones-- han convocado una reunión formal para que los líderes políticos independentistas se sienten a negociar, una cumbre que por ahora no tiene fecha.

En un comunicado, sentencian: "En estos momentos de emergencia nacional creemos imprescindible hacer un llamamiento a la generosidad. Hace falta sentarse y negociar. Olvidar los desencuentros y agravios y es escribir una hoja en blanco donde podamos dibujar el guión de un futuro mejor".