La Monumental de Barcelona, el único coso taurino que permanece abierto en Cataluña, celebrará ocho festejos taurinos durante agosto y septiembre, antes de finalizar la actual temporada, la penúltima prevista en la comunidad tras la aprobación por parte del Parlament de la prohibición de celebrar más corridas a partir de 2012.

En declaraciones a Europa Press, fuentes de Funciones Taurinas -la empresa que explota el negocio de la plaza barcelonesa, propiedad de la familia Balañá- han señalado que para el mes de agosto están previstas cinco corridas, una cada domingo, en las que se lidiarán seis toros por jornada y para la que está programada la actuación de toreros menos conocidos.

Tradicionalmente, La Monumental acoge durante el mes de agosto a toreros de segunda fila, aunque durante el mes de septiembre el cartel recupera a algunas de las principales figuras del toreo actual para culminar con la celebración de La Mercè.

Durante los dos últimos años, el diestro José Tomás ha actuado en el cierre de la temporada taurina de la capital catalana, protagonizando el lleno de las 18.000 localidades de la plaza. Tomás es el único torero que ha logrado este hito durante los últimos años, en un ruedo que habitualmente presenta un tercio de la entrada disponible.

Sin embargo, y como consecuencia de la grave cogida que sufrió el diestro en la plaza de Aguascalientes (México) en abril, los promotores de los festejos consideran "muy improbable" que éste pueda acudir a torear a Barcelona en lo que resta de año.

Pese a que todavía no está cerrado de forma definitiva el nombre de los toreros que acudirán a Barcelona en el cierre de la penúltima de las temporadas previstas, dichas fuentes recordaron que Tomás ha suspendido todas las faenas que tenía programadas en 2010 y se encuentra siguiendo un programa de rehabilitación después de que el toro Navegante estuviera a punto de acabar con su vida.

Entidades taurinas han anunciado que recurrirán la prohibición aprobada por la mayoría absoluta de los diputados catalanes, y revertir así la extinción de las corridas de toros a partir de enero de 2012, para lo que también se plantean acudir al Tribunal Constitucional.