La Comisión Constitucional del Congreso aprobó este miércoles las propuestas del PSOE y del PP para reformar la legislación electoral con el fin de estrechar el círculo sobre Batasuna y no permitir que se 'cuele' en las instituciones, ni siquiera en listas de partidos legales como Eusko Alkartasuna.

Esa parte del informe de la subcomisión encargada de la reforma laboral se ha votado separadamente y ha cosechado el voto en contra del PNV y de IU, mientras que CiU ha optado por abstenerse. Eso sí, en principio no habrá más votación separada y estos cambios se unirán al resto del informe cuando haya que plasmar todas las recomendaciones en una proposición de ley articulada.

Los cambios, defendidos por el socialista José María Benegas y el 'popular' José Antonio Bermúdez de Castro, pasan por ampliar los plazos para impugnar listas sospechosas con el fin de tener más tiempo para evitar que concurran en elecciones y que tomen posesión de sus cargos, por anular listas de un partido legal por la presencia "contaminante" de candidatos de la izquierda abertzale ilegalizada, y por aplicar una "incompatibilidad sobrevenida" a los cargos de formaciones ilegalizadas después de celebrados los comicios.

El PSOE y el PP, que han trabajado con el Ministerio del Interior para concretar la articulación de estas reformas, reivindicaron las ventajas de haber excluido a los terroristas de las elecciones y defendieron la necesidad de evitar cualquier resquicio que permita eludir la legalidad a Batasuna y sus herederos. "Vamos a taponar las vías ambiguas", comentó Benegas.

Sin embargo, para el portavoz del PNV en la comisión, Aitor Esteban, es "lamentable" que PSOE y PP esperasen hasta los últimos minutos de la última reunión de la subcomisión electoral para presentar estos cambios relativos a Batasuna.

Lo achacó a la existencia de "dudas más que fundadas de constitucionalidad", que en su opinión se refieren principalmente a la incompatibilidad sobrevenida de los cargos de formaciones ilegalizadas y la renuncia a la violencia exigida para no ser expulsado.

También el diputado de IU, Gaspar Llamazares, se refirió a este punto recordando que en España no rige la militancia constitucional y que no se puede exigir a todo el mundo que apoye la Carta Magna. "Se considera patología lo que es normal", comentó.

"Esto es un parásito"

Llamazares censuró también las formas empleadas, el hecho de que estos cambios legales se hayan gestionado entre los dos partidos mayoritarios y que se hayan incluido en la reforma electoral. "Esto es un parásito, debía ir en otro ámbito", aseveró.

El ponente de CiU, Jordi Xuclà, defendió su abstención por esa queja de haber quedado al margen de la negociación pero dijo confiar en que la redacción que hoy se vota pueda ser modificada en el trámite parlamentario. "Quedamos a la espera del desarrollo legislativo", zanjó.

Finalmente, las recomendaciones para la reforma de la LOREG en lo relativo a Batasuna salieron adelante con el voto de los dos grupos mayoritarios más Coalición Canaria, frente al rechazo de PNV e IU y la abstención de CiU.