El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, ha explicado que España facilitó la llegada a Lanzarote ayer de la activista saharaui Aminatu Haidar, después de que Marruecos no la dejase entrar en El Aaiún el pasado viernes, ya que tiene tarjeta de residencia legal.

"Si por razones administrativas, (Haidar) no ha rellenado los requisitos que el Gobierno marroquí le pide, lo que hemos hecho es facilitar la llegada a Lanzarote", ha manifestado Moratinos en declaraciones a los periodistas, a los que ha comentado que se ha hecho "nada más y nada menos que lo que corresponde hacer a un país donde esta ciudadana tiene la tarjeta de residencia legal".

El máximo responsable de la diplomacia española ha recalcado que si el Gobierno "tuviera algo en contra de ella, no se habría renovado la tarjeta de residencia", un documento que tiene en vigor.

Por otra parte, Moratinos se ha pronunciado sobre la admisión a trámite de una querella por prevaricación administrativa y malversación de caudales públicos contra el secretario de Estado para la Unión Europea, Diego López Garrido, por la concesión de subvenciones a la Fundación Alternativas (de la que fue patrono) y se ha mostrado confiado en que se clarificará el asunto.

Secuestro del Alakrana

El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación también ha subrayado que el Gobierno ha desplegado todos los "esfuerzos políticos y diplomáticos necesarios" para que los tripulantes del 'Alakrana', secuestrado por piratas somalíes, sean liberados y regresen a casa.

Moratinos ha incidido en que el Ejecutivo trabaja "con enorme intensidad desde el primer día" para lograr la liberación de los tripulantes del barco pesquero, un trabajo en el que "no descansa" y dedica las "24 horas del día para encontrar una solución", que ha confiado en que se produzca de la forma "más rápida posible".

Por este motivo, ha pedido tranquilidad y "dejar trabajar al Gobierno", que ha recordado que es "el que tiene la responsabilidad para asumir todas las tareas", y está realizando "todos los esfuerzos para resolver este caso de forma satisfactoria".

Así, ha concretado que el objetivo del Ejecutivo es que todos los tripulantes vuelvan a sus casas "sanos y salvos", y "con todas las garantías".