En una entrevista en ETB recogida por Efe, Setién aseguró que "la única posibilidad para resolver el conflicto vasco es seguir hablando" entre las partes enfrentadas.

"No entiendo, si efectivamente es ilegal el hablar con grupos que puedan tener una relación con ETA", cómo pudo un Parlamento aprobar una resolución en que afirmaba que "efectivamente se puede tener esa relación", señaló.

Si se aceptó, dijo el obispo, "que no es ilegítimo, ni injusto" el diálogo con ETA, "no se puede llevar al lehendakari a la cárcel" por mantener reuniones con la izquierda abertzale .

Así, Setién se preguntó si es que el Congreso dio "una autorización para violar la ley" en determinadas situaciones con la resolución de 2005 que defendía el diálogo para acabar con la violencia.

Añadió que "más allá de la moralidad y el Derecho, hay algo más profundo que es una voluntad sincera de buscar la solución de un problema político que existe aún cuando ETA no hubiera existido, que exige unas actitudes diferentes a las que se quieren imponer", sentenció.

Sin entrar a valorar "el acierto político o no de la propuesta del lehendakari", consideró que "no puede negarse" la celebración de una consulta "en libertad, para que la población pueda manifestar lo que quiera hacer con los problemas que están en el debate" sobre su futuro.

Sobre el proceso de paz iniciado durante el último alto el fuego de la organización terrorista, opinó que falló porque no pudo mantenerse la distinción que se hizo entre el diálogo en una mesa para la paz y otra creada para la normalización.

Pero esa negociación fracasó también, según señaló el obispo, porque las partes fueron con premisas "fundamentales" que eran "incompatibles entre sí".

Argumentó que al dialogar "se debe buscar una aproximación que sea lo suficientemente significativa como para que unos y otros estén de acuerdo con lo que ha de ser objeto de pacto" y se baraje la posibilidad de "hacer cesiones", ya que, de lo contrario, cualquier proceso "estará condenado al fracaso".

Analizó que, después de la tregua, se ha retomado "la vía de la represión de ETA por vía policial", pero así, advirtió, "no se aborda la totalidad del problema del País Vasco".

A su juicio, "hay un conflicto" que además de tener "una dimensión violenta" requiere de una normalización política, concluyó.