Mi gato, de la noche a la mañana, ha dejado de comer. Es lo que me faltaba. No es bastante con estar todo el día encerrados en casa y no poder salir, como para que ahora surja un problema de este tipo. ¿Qué puedo hacer?

Son días complicados para todo y para todos pero intenta estar tranquila. Las clínicas veterinarias, como servicios esenciales que son, están atendiendo con cierta normalidad. Verás, los gatos son muy sensibles y, a lo hora de comer, bastante sibaritas. Además, tenernos todo el día en casa ha trastocado sus costumbres cotidianas. Eso no quita que ni pueda estar sin comer ni, por otro lado, sepamos a ciencia cierta si es eso lo que le puede estar pasando. De forma general, podemos aconsejarte que le des comida más especial. En el mercado encontrarás gran variedad de latas para gatos exigentes. También suele funcionar bien ponerle la comida más tibia. En cualquier caso, habría que ver por qué no está comiendo. Puede ser, desde que esté desganado, alterado, tenga bolas de pelo en el estómago, heridas en la boca, problemas en los dientes o, incluso, que esté padeciendo alguna patología concreta. Lo mejor es que, cuanto antes, acudas a tu veterinario para que realice un diagnóstico adecuado.