La Policía de Colombia ha comunicado que algunos grupos de narcotraficantes podrían estar usando perros para trasladar e introducir droga en otros países. Las sospechas saltaron cuando, en la frontera entre Colombia y Ecuador, detuvieron a una persona que ocultaba en un cachorro de perro heroína por valor de medio millón de dólares. El destino, evidentemente, era la distribución y venta de la misma. No es la primera vez que se detecta el uso de animales por parte de narcotraficantes. En España, por ejemplo, introducían droga en el interior de terrarios donde transportaban serpientes altamente venenosas.