Cortar las uñas de un perro es más delicado de lo que parece. Básicamente, fijándonos en el color de las mismas, existen dos tipos de uñas en los perros: las blancas y las negras. En el caso de las primeras, podemos ver cómo las uñas poseen una zona con una coloración más rosada que está pegada a lo que sería el dedo del animal. En esa zona se encontraría el conocido como «paquete vascular». Por lo tanto, a la hora de cortar ese tipo de uña se debe, a partir de dicha zona, dejar unos milímetros y cortar el resto. En el caso de las uñas negras es más complicado. De forma genérica podemos decir que se debería cortar sólo una cuarta parte de la longitud de la uña. En ambos casos, el problema puede venir si se corta más de la cuenta y el animal sangra. Si eso ocurriera, simplemente, habría que desinfectar y cortar la hemorragia. En cualquier caso, lo mejor es que regularmente acudas a tu veterinario y que él se encargue de algo tan delicado para tu perro como son sus uñas.