Lo primero es pedirte que lo pienses bien. Aunque, en general, las gallinas son bastante silenciosas, lo más normal es que tengas problemas por suciedad o molestias con los vecinos y que, al final, el asunto acabe en denuncias. Por otro lado, para una gallina, evidentemente, lo ideal es un suelo de tierra y paja y no de mármol o gres. En cualquier caso, dado la mala vida que llevan en muchas granjas, no vamos a poner mucho más empeño en hacerte desistir del asunto.

Lo primero que debes saber es que las gallinas son animales muy curiosos y activos que, salvo que estén incubando huevos, les gusta estar todo el día picoteando. Las gallinas viven, aproximadamente, unos diez años y suelen poner unos 200 huevos al año. En cuanto a la comida, aunque les encanta la verdura fresca y tierna, puedes comprarle pienso específico. Vienen a comer entre 100 y 200 gramos diarios.

Respecto al gato, para evitar riesgos, lo mejor es que cuando llegue a tu casa la gallina sea ya adulta. Si es así, no debe haber problemas. Por último, recordarte que aspectos como la desparasitación, en ellas, resultan básicos, por tanto acudir regularmente al veterinario será esencial.