Son muy, muy peligrosas. ¿Has oído hablar alguna vez de la procesionaria? Su picadura en perros es una de las urgencias veterinarias más frecuentes y graves que puede, incluso, conducirles a la muerte por un shock anafiláctico. Los síntomas que presentan son claros: jadeos, vómitos, hinchazón paulatino de la cabeza, de la lengua y de las fauces y, si no es tratado adecuadamente, edema de glotis y muerte por asfixia.

Si alguna vez te despistas y ves que tu animal ha podido estar en contacto con estas orugas, no lo dudes, dirígete rápidamente al veterinario más cercano. Tratado a tiempo se soluciona fácilmente, pero, si no lo haces, la lengua de tu perro puede sufrir una necrosis con pérdida de parte de ella e, incluso, como antes te he comentado, llegar a morir.

Como último consejo, te diría que debes evitar, de forma general, las pinadas y, si no es posible, llevarlo siempre bajo control cuando camines por alguna de ellas. Por cierto, una cosa más, deberías dar aviso a las autoridades para que actúen y fumiguen adecuadamente. No lo olvides, está en juego la vida de muchos perros de la zona.