"Ha terminado el estado de alarma y estamos en la nueva normalidad. No nos pueden imponer estas restricciones. Nos obligan a trabajar cada 15 días y no es viable. Están jugando con el pan de más de cien familias". Sebastián Moreno, portavoz de los vendedores de textil del mercadillo de los jueves de Xàbia, ha expresado esta mañana la indignación de este sector con la decisión del ayuntamiento de reducir a la mitad sus puestos de venta. Esto les obliga a turnarse y a montar cada dos semanas. Además, antes de la epidemia, el mercadillo ocupaba tres plazas, la de la Constitución, la de Marina Alta y la del Convent. Ahora el consistorio lo ha reducido a una sola, la de la Constitución. La concejala responsable, Marta Bañuls, que hoy ha acudido a hablar con los vendedores de textil, que se han negado a montar las paradas, les ha indicado que el ayuntamiento no tiene personal para controlar esos tres espacios.

"En todos los mercadillos de la Marina Alta estamos ya trabajando como antes de la crisis del coronavirus. Hemos reducido los puestos medio metro y, por supuestos, llevamos mascarillas y tenemos gel hidroalcohólico. Eso es la nueva normalidad. Pero aquí nos quieren mantener en la fase 3 hasta diciembre", afirma Moreno, mientras muestra el plano del "nuevo" mercadillo que les ha facilitado el ayuntamiento y en el que se lee, efectivamente, fase 3.

"Tenemos derecho a que nos den una solución. Pero la concejala se cierra en banda", ha lamentado el portavoz de los vendedores. "Pueden reubicar el textil en otro lugar como la Vía Augusta, pero se niegan. Llevamos cuatro meses sin trabajar y ahora, en julio y agosto, podemos recuperar algo, pero si trabajamos todos los jueves. Montar un jueves sí y otro no es un desastre para nosotros. Y se perjudica también a los clientes. ¿Cómo van a devolver un producto a la semana siguiente?".

"Hemos montado ya todos los puestos en todos los mercadillos de la Marina Alta y aquí, en Xàbia, el ayuntamiento no nos deja. Le damos opciones y no las acepta. Es incomprensible", ha indicado Moreno.

Los vendedores han acudido ahora a la puerta del ayuntamiento. Quieren que el alcalde, José Chulvi, los reciba y les dé una solución cuanto antes. "No vamos a montar hasta tener una solución. Pero nos urge. Necesitamos trabajar con normalidad", ha añadido Moreno.