La montaña pública de la Granadella de Xàbia amarillea. Se ha regenerado estupendamente del terrible incendio de septiembre de 2016. Pero el fuego marca pautas. Hay especies vegetales que se aprovechan de estas catástrofes. Una de ellas es la aliaga (Ulex parviflorus), que germina masivamente tras los incendios. Su floración empieza en enero. Sus flores son amarillas. La imagen es bella. Pero las aliagas colonizan terrenos degradados por repetidos fuegos y que antes estaban cultivados y se han abandonado. Que rebrote por doquier revela un empobrecimiento de la biodiversidad. Le come el terreno a otras especies botánicas.