Los oficios del mar (los nuevos y los viejos) tienen futuro en la Marina Alta. Alumnos de 1º de Bachillerato del instituto Maria Ibars de Dénia se han metido en la piel de los viejos calafates o carpinteros de ribera. En sus clases de tecnología, están construyendo un velero de madera (un Vaurien, que destaca por su casco plano).

Mientras, los estudiantes del programa formativo de cualificación básica «actividades auxiliares y de apoyo a buque en puerto», que oferta el Creama de Dénia, han realizado un intercambio didáctico con los alumnos del Maria Ibars. Han abordado, entre otros contenidos, el de la fibra en los barcos de recreo.

El sector náutico demanda trabajadores cualificados. Es un nicho de empleo en el litoral de la Marina Alta. Pero, al mismo tiempo, hay que reivindicar los viejos oficios. Y uno de los más importantes es el de los calafates, artesanos y arquitectos del mar.