En el pabellón deportivo de Dénia, destrozado por el tornado que en la madrugada del pasado 12 de septiembre tocó tierra en la playa de la Punta del Raset y dejó un fuerte rastro de destrucción, se ha detenido el tiempo. Allí siguen los escombros. Tiene una explicación.

El edil de Gent de Dénia Mario Vidal preguntó en el pleno del jueves por qué todavía no se había borrado la huella del estropicio. La concejala de Territorio, Maria Josep Ripoll, del PSPV, explicó que las obras de reparación de esta instalación deportiva (también se construirá un nuevo pabellón) «está previsto que se inicien muy pronto». Además, precisó que durante estas semanas han acudido los peritos a evaluar los daños y «era mejor no tocar nada». Negó que la presencia de los escombros supongan un peligro. «La zona está acordonada. No se puede entrar», recalcó.

El destrozo del pabellón evidenció la violencia del tornado. Una pared se vino abajo y todo el techo quedó retorcido. La instalación deportiva quedó inservible. Los equipos han tenido que peregrinar a otros pabellones de la Marina Alta. El gobierno local, del PSPV, ha decidido reconstruir este recinto deportivo y construir un nuevo pabellón que sí se adapte a las actuales necesidades de los clubes.