Lo barato sale caro. Al menos eso es lo que parece que ha pasado este verano en las playas de Teulada-Moraira. El concejal de Medio Ambiente, Carlos Martínez, aseguró que los «problemas» de este verano en la vigilancia de playas son consecuencia del «deficitario» pliego de condiciones. El contrato lo adjudicó el PP antes de las elecciones. Sólo fijó un criterio: el de la oferta más económica.

Se llevó el gato al agua la empresa Servicios de Personal de Hostelería y Restauración, S. L. El nombre de la firma ya levantó las primeras reticencias, ya que no daba pistas de que se dedicara (el objeto social sí lo especificaba) a la vigilancia y socorrismo en las playas. «Nos gastamos 106.000 euros. Puede parecer mucho, pero no lo es. Otros años la cifra era de 130.000 y 136.000. Se ha recortado. Y es un servicio en el que es necesaria la calidad», dijo el edil de Medio Ambiente en la segunda asamblea convocada por el pacto de Compromís, PSPV y dos ediles no adscritos para rendir cuentas por sus primeros cien días de gobierno.

Martínez anunció que tiene una reunión con la adjudicataria y le trasladará lo que opina el gobierno local sobre la gestión de la vigilancia este verano. Dijo que «el técnico y medio» del departamento de Medio Ambiente ha controlado los «incumplimientos» de la firma.