Las torres más recias (y con más historia) también sucumben. La nueva fiebre inmobiliaria pone en el mercado torres vigía y mansiones colgadas del acantilado. Son «productos» urbanísticos singulares (y un punto inverosímiles). Y su precio está por las nubes. Ahora mismo el «top» inmobiliario de Xàbia lo lidera una finca de 40.225 metros cuadrados del Portitxol que incluye una torre defensiva del siglo XIV declarada BIC (Bien de Interés Cultural). Se vende por 15 millones de euros. El segundo escalón es para una mansión que se construyó con licencia de hotel (de ahí su desmesurada volumetría) en el acantilado de la Falzia. Cuenta con permiso para helipuerto. Su precio es de 12,5 millones.
La torre del Portitxol corona un promontorio litoral desde el que se divisa toda la ensenada comprendida entre el Cap de Sant Martí y el Cap Negre. Enfrente queda l'Illa del Portitxol. La construcción defensiva se halla dentro de la finca privada que ahora está a la venta. También hay cuatro villas (1.400 metros cuadrados construidos) paredañas que comparten un jardín central.
Todo el terreno está rodeado de frondosos pinos. Tanto han crecido los árboles que no hay forma de ver ni la torre ni las casas. En cambio, desde la parcela sí se atisba toda la bahía del Portitxol.
La finca dispone de cinco aljibes. El plan general de 1990 le daba la clasificación de suelo urbanizable no programado. El nuevo plan estructural, que todavía está en fase de aprobación definitiva, protege todo el suelo que tenía esa calificación.
Esta finca ahora en venta por 15 millones linda con los 64.290 m2 donde la promotora Construcciones Torre del Portitxol ha presentado un PAI para construir chalés y un hotel. Este otro suelo forma parte de la misma loma, pero tiene la clasificación de suelo urbano extensivo.
Mientras, la mansión de la Falzia que ahora se vende por 12,5 millones se concibió como hotel con encanto. La empresa Golden Gate Resort pidió en el verano de 2006 la licencia de apertura. Pero el hotel nunca llegó a funcionar. Seis años después el entonces gobierno local (PSPV, Xàbia Democrática y CpJ) aceptó la compatibilidad de uso residencial que solicitó el dueño. El fallido hotel se convirtió en un inverosímil casoplón colgado del acantilado (también se asoma a la bahía del Portitxol y al Cap Negre). La agencia inmobiliaria que anuncia su venta destaca que aquí «todo se ha diseñado a la lo grande» y que «el lujo predomina». El chalé, de 2.300 m2, dispone de 10 dormitorios y 12 baños distribuidos en cuatro plantas. Una mole.
Xàbia paraliza las obras en la última parcela virgen del Muntanyar
La concejala de Urbanismo de Xàbia, Isabel Bolufer, del PSPV, desveló ayer que el ayuntamiento ha ordenado la paralización de las obras que se llevan a cabo en la última parcela virgen de primera línea del Segon Muntanyar. La edil precisó que al promotor también se le ha abierto expediente por iniciar los trabajos, que son de construcción de un restaurante, con una licencia que el pleno ha declarado lesiva. Si la empresa no suspende los trabajos, acudirá la policía a precintarlos.
