Decididamente, la fauna marina se enfrenta a un sinfín de amenazas. Si la Cruz Roja rescató ayer a una tortuga enredada en una maraña de plásticos y cuerdas y hallada en aguas del Portitxol de Xàbia, los socorristas de SVS tratan de salvar ahora a otro de estos animales (son tortugas bobas o 'Caretta caretta') encontrado esta mañana flotando en la cala de la Fustera de Benissa. Esta tortuga presenta un fuerte golpe en la cabeza. Es probable que se lo haya dado una moto acuática o una embarcación.

Los socorristas la han sacado del agua y la han llevado, siguiendo indicaciones de los expertos, a la enfermería de la cala de la Fustera. Han avisado al 112 y se ha activado todo el protocolo de rescate de estos animales. Está avisada la Universitat de València y el Oceanogràfic, que ha desplazado un equipo de recuperación para tratar de salvar al quelonio.

Además de la tortuga rescatada ayer en el Portitxol de Xàbia, el viernes se halló en aguas de la Granadella a otra muerta y atrapada en un palé. Mientras, también ayer se desalojó la playa del Moraig de Benitatxell al sacar el mar un delfín muerto y en avanzado estado de descomposición. La basura arrojada al mar y la proliferación de vehículos náuticos son una seria amenaza para la fauna marina.