Suena la música en la playa de la Fossa y a Iván Souza Amador, de 32 años y monitor de tiempo libre para uno de los grupos hoteleros más importantes de Calp, le sorprende que dos de las mujeres más activas se queden paradas, petrificadas. Luego les pregunta. Ellas se niegan a bailar al son de temas de reguetón, salsa y merengue con letras machistas, misóginas y denigrantes para la mujer. Ambas pertenecen a la asociación de Mujeres por la Igualdad de Calp. El monitor las entiende perfectamente. Y decide suprimir esos temas. Los bailes se liberan de machismo. Mujeres por la Igualdad agradeció el domingo a Iván y a los monitores su implicación. Las integrantes de este colectivo asistieron a la sesión de baile en la Fossa. Destacaron que hay que evitar que se normalicen mensajes que degradan a la mujer. En esta playa de Calp, la igualdad y el respeto suenan ahora con fuerza.