Todos los puertos de la zona recibieron el martes por la tarde un aviso especial de Salvamento Marítimo. Esa fue la clave para que ayer un pescador de Oliva avisara a los servicios de emergencia al ver, mientras faenaba, un cadáver flotando en el agua. Era el del bañista de 70 años que desde hacía casi tres días buscaban sin cesar todos los servicios de emergencia en Dénia.

Fue hacia las 9.30 de la mañana cuando este pescador que se encontraba faenando frente al complejo hotelero del Oliva Nova Golf, cuando pudo ver que estaba flotando en el agua el cuerpo de un hombre.

De inmediato dio aviso a los servicios de emergencia y se acercó a la zona una embarcación de la Guardia Civil con miembros de los equipos de rescate subacuático. Poco tardaron en confirmar que se trataba del cuerpo sin vida del bañista de Dénia.

La Guardia Civil se encargó del traslado del cuerpo al Club Náutico de Oliva y de su identificación, fue rápida ya que poco antes del mediodía de ayer confirmaron que efectivamente era él. Las corrientes llevaron el cuerpo desde la playa de Els Molins de Dénia hasta la zona de Oliva Nova Golf, unos 12 kilómetros más lejos si se va en coche.

El cuerpo estuvo custodiado en puerto por los agentes de la Guardia Civil de Oliva y por la tarde la comisión judicial procedió al levantamiento del cadáver, en un municipio Oliva que se encuentra celebrando sus festejos de Moros y Cristianos.

Una larga angustia

La desaparición se produjo el martes poco antes del mediodía. El bañista había salido, como todos los días, a darse un chapuzón. Dejó sus pertenencias en la playa y se adentró en el agua con una boya de seguridad, pero no volvió.

Pasaron dos horas y la familia comenzó a preocuparse y alertaron al socorrista de la Cruz Roja que está en esa playa. De inmediato, se inició una primera búsqueda por tierra con efectivos de la entidad y la Policía Local, vieron las pertenencias. Con el paso de las horas, la Cruz Roja activó el servicio búsqueda por mar con Salvamento Marítimo, tanto por aire con el Helimer 215 con base en el puerto de Valencia y la Salvamar Diphda que opera desde Xàbia.

Además desde el centro de Coordinación de Salvamento Marítimo en Valencia emitieron un aviso a todos los puertos de la zona de Dénia (Xàbia, Oliva y Gandia) para que los patrones de las embarcaciones estuvieran atentos.

A las tareas de búsqueda se incorporaron también dos patrulleras de la Guardia Civil, así como los agentes especializados en submarinismo de la propia Benemérita. Junto a los equipos de intervención en el mar que tiene la Cruz Roja de Dénia como parte de su contrato de vigilancia de las playas de Dénia.

La entidad también movilizó al equipo psicosocial para que estuviera apoyando a los familiares de cara a una resolución traumática del suceso. Este equipo ha acompañado durante estos tres largos días de búsqueda a los familiares del bañista.