Cala de la Granadella: Xàbia hará segura la vía de escape tras más de 30 años.

Un vial olvidado durante treinta años es ahora clave para salvar de la masificación turística la cala de la Granadella de Xàbia. Y también es imprescindible para evacuar la playa en caso de emergencia (aquí lo que quita el sueño son los incendios). Ese vial es la calle Pic Tort.

Hace dos veranos, cuando se cerró en julio y agosto al tráfico la carretera de acceso a la Granadella (los coches colapsaban la cala), esta calle que sube en zigzag por una ladera virgen se convirtió en una suerte de vía de escape.

El autobús y el trenecillo que lleva a la playa a los bañistas necesitan que la carretera esté expedita. Quedarían bloqueados si se topan con coches de cara. La solución fue que los automóviles salieran por Pic Tort, que sólo tiene una dirección: cuesta arriba.

Pero el vial está hecho trizas. Nunca, en treinta años, se ha reasfaltado. Tiene una fuerte pendiente y cerradas curvas de herradura. No hay pretil. No es apto para conductores con vértigo.

De ahí que, por fin, el Ayuntamiento de Xàbia se haya decidido a mejorar la seguridad de esta vital vía de escape. Las obras se sacarán a licitación por 221.853 euros. Durarán dos meses. Es evidente que ya se llevarán a cabo tras el verano.Caídas de 6 metros

Los propios técnicos municipales advierten en el proyecto de obras de que ahora mismo este vial es peligroso. Carece de protecciones laterales. Y las caídas son de más de 6 metros. En verano, los coches aparcan en las curvas y laterales. Queda un estrecho pasillo para pasar.

Ahora, tras 30 años, se reasfaltará. También se reordenará el aparcamiento. Las plazas se pintarán en cordón. Se mantendrá la señalización vertical existente, que deja claro que hay un único sentido, ascendente. También se instalará una barrera de protección de acero y revestida de madera. El diseño de ese quitamiedos se integra en el paisaje. Esta ladera virgen se recupera ahora del incendio que la arrasó en septiembre de 2016. El proyecto precisa que no es necesario realizar una evaluación de impacto ambiental.

Este vial se abrió para llenar esta cara norte de la cala de la Granadella de chalés que no llegaron a construirse. Conecta la cala con la urbanización de Costa Nova, donde sí se siguen levantando casas de lujo colgadas del acantilado.