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Los ciclistas niegan que destrocen las sendas del Montgó

Piden que, en lugar de prohibir, se regule el uso de la bicicleta en los senderos del parque natural

Los ciclistas niegan que destrocen las sendas del Montgó

Los ciclistas de montaña están hartos de tropezar con piedra. «Nosotros no destrozamos las sendas. Somos los primeros que queremos que la montaña esté cuidada», explicó Julio Carrión, delegado en la Comunidad Valenciana de la International Mountain Bicycling Association (IMBA). «Se nos criminaliza. Si llueve y se forman cárcavas en las sendas, nos culpan a nosotros», lamentó.

En los parques naturales se está limitando al máximo el deporte de la bicicleta. Y ahora toca el Montgó. En el último boletín de este espacio protegido, se anunciaba que el equipo de Educación Ambiental trasladará una circular a los ciclistas de montaña para dejarles claro que está prohibido que pedaleen por las sendas. Sí pueden rodar por las pistas forestales.

Los deportistas rechazan la prohibición. Ciclistas de montaña de la Marina Alta consultados por este diario lamentaron que «pagamos todos por unos pocos que no tienen 'trellat'». Insistieron en que defienden la montaña y que ellos mismos reprenden a los aficionados a este deporte que se dedican a abrir nuevas sendas o a trazar atajos.

En zonas como la del Coll de Pous, en la ladera sudoeste del Montgó, los técnicos del parque natural colocan piedras en las nuevas trazadas que abren algunos ciclistas para bajar más rápido. Hay deportistas que cuando ven una de estas piedras desplazada la vuelven a colocar en el sitio. «No queremos provocar impactos. Nosotros también debemos concienciarnos y hacer un uso responsable de las sendas», indicaron los deportistas antes citados.

Julio Carrión es de la misma opinión. Insistió en que, en lugar de prohibir, la conselleria y los parques naturales deben regular los usos de las sendas.

Las Cortes también van en esa línea. El 2 de junio de 2016 la comisión de Medio Ambiente aprobó una resolución que abogaba por «hacer compatible» en las revisiones de los planes de uso y gestión de los parques naturales la práctica deportiva y la conservación de los valores naturales.

«Si hay una senda que atraviesa una reserva de flora, está claro que debe prohibirse que pasen las bicis. Lo asumimos. Pero no debe ser la norma», indicó Carrión, que defendió que el ciclismo de montaña genera «turismo y riqueza». «Nosotros también estamos dispuestos a participar en campañas medioambientales y de cuidado de la montaña. Y, por supuesto, debemos ser cívicos y convivir con respeto con otros usuarios de la montaña como los senderistas».

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