Alcaldes y concejales de Compromís en la Marina Alta y la portavoz de la coalición, Àgueda Micó, hicieron ayer piña en Calp. Hurgaron en los titubeos del ministro de Fomento, José Luis Abalos, y del grupo socialista en el Congreso sobre la gratuidad de la AP-7 cuando acabe la concesión el 31 de diciembre de 2019. «La autopista está pagada y repagada. Estamos en contra de cualquier tipo de gravamen», recalcó Micó. Mientras, el portavoz de Compromís en la Diputación de Alicante, Gerard Fullana, recordó que el peaje es una herencia franquista y ya es hora de que los vecinos de la Marina Alta se la quiten de encima.

Pero Compromís también pide a Fomento que cuando la AP7 sea, por fin, una autovía gratuita se creen nuevas conexiones directas. Y una es la de Calp. Y ahí los valencianistas ya no van de la mano. Su portavoz en Benissa, Xavi Tro, quien ayer participó en la reivindicación en Calp, dejó claro en una nota de prensa que su colectivo local rechaza esa obra y la considera «totalmente innecesaria».

Tro afirmó que los accesos (ahora peajes) de Ondara y Benissa ya son suficientes. Además, se está ejecutando la reivindicada variante de Benissa, que permitirá que los conductores que salen de la autopista se planten en un periquete en Calp. Ahora tienen que cruzar la travesía urbana benissera, saturada en horas punta de coches y camiones.

Este portavoz municipal advirtió también de que la conexión directa con Calp saldría «muy cara» y tiene un fuerte impacto ambiental. Abriría una herida en «un territorio frágil y un paisaje muy deteriorado por el urbanismo salvaje». La oposición de Compromís de Benissa no es de tono bajo. «Queremos decir bien fuerte y bien alto que nos oponemos totalmente a esa conexión», recalcó Xavi Tro.

Además de ese enlace directo, los valencianistas han exigido a Abalos que incluya en los presupuestos del Estado mejoras en la N-332 en el tramo entre Ondara y Gata de Gorgos y una nueva conexión con Altea. También reclaman otros enlaces en la Comunitat Valenciana que conviertan la AP7 gratuita (será, por tanto, autovía) en una carretera útil para la población. Para la Marina Alta, privada desde hace décadas del tren entre Dénia y Gandia y con la línea ferroviaria de vía estrecha (el «trenet de la Marina») cerrada desde el verano de 2016 por obras, esa futura autovía es imprescindible para empezar a romper el aislamiento.