El proyecto de educación agroecológica se abre camino en los colegios de la Marina Alta. Coordinado por José Manuel Bisseto, aboga por cultivar en las escuelas huertos escolares y por poner en marcha comedores ecológicos en los que se elaboren los platos con productos de proximidad y de temporada. La naturaleza entra en los colegios. Ya es descorazonador ver patios de hormigón en los que no hay árboles ni plantas. Este proyecto de ecoescuelas, que lleva por título «Educant amb la natura» y que se presenta el próximo 9 de noviembre en Alcalalí (asistirá el conseller de Educación, Vicent Marza), trata de corregir ese desapego medioambiental.
La respuesta en la Marina Alta está siendo magnífica. Se han sumado 30 centros educativos. Trabajan en red y comparten metodologías relacionadas con el medio ambiente y la ecología.
Esta iniciativa también implica al sector agrícola y a la hostelería. Además, tiene una vertiente de salud. Aboga por una alimentación más sana y equilibrada. Comulga con la filosofía agroalimentaria que late en el proyecto Dénia Ciudad Creativa de la Gastronomía de la Unesco, el Biomoscatell de Benitatxell, la recuperación de variedades tradicionales de arroz en el Marjal de Pego o el Mercat de la Terra de Xaló.
