Las casas de Xaló huelen a romero. Las mujeres, acostumbradas a llevar en silencio el peso de tantas y tantas cosas, han mantenido viva durante siglos una de las tradiciones más bellas de la Marina Alta. Ahora Xaló les rinde homenaje. Rescata la historia de «les dones del romer». Ese es el título de un documental que, impulsado por la comisión transversal de Igualdad y Diversidad, da voz a seis xaloneras (Tonica, Vicentica, Mari, Isabel, Teresa y Angelita) que evocan la Festa del Romer y la costumbre de amasar y elaborar para ese día los bollos, una especie de empanadillas rellenas de guisantes. El documental, que reivindica la sabiduría de estas mujeres, también tiene un subtítulo sugerente: «una fiesta transmitida de manos a manos».

La Festa del Romer se celebra dos fines de semana después de la Pascua. Las mujeres desgranan los guisantes, los cocinan y hacen la masa de los bollos. Ese proceso es familiar. Se transmite de madres a hijas; también de abuelas a nietas. El sábado se celebra una romería que sube a la montaña de la Solana. Los participantes meriendan allí los bollos. Y recogen el romero con el que también las mujeres confeccionan ramos que atan con cintas de colores. El domingo se bendicen en la misa. Y las familias los colocan en sus casas, donde se secan poco a poco e impregnan el hogar del fresco olor de la montaña. La tradición se remonta, como poco, al siglo XVIII. Los ramilletes de romero protegen las cosechas.

La concejala de Igualdad de Xaló, Jana González, destacó ayer que el testimonio de las seis mujeres que evocan la tradición en el documental es «valiosísimo». «Gracias a ellas y a otras muchas xaloneras esta fiesta se ha mantenido en el tiempo. Hemos querido reivindicar esa labor de transmisión que las mujeres han hecho durante tantos y tantos años», explicó la edil.