Dénia lleva todo el verano sumida en una maraña de obras, por ello, ante el inminente inicio de los trabajos para la rehabilitación completa de la Casa de la Marquesa Valero de Palma, el equipo de gobierno (PSPV y Compromís) mantuvo ayer un encuentro con los vecinos y comerciantes de la zona. El objetivo tranquilizarlos y exponer el plan de trabajo.

«Las obras van a generar molestias» reconoció la concejala de Territorio, Maria Josep Ripoll, al finalizar la reunión, pero pretenden «tratar de coordinarnos todos para minimizarlas».

En la reunión participaron una veintena de vecinos y comerciantes, la propia Ripoll, el alcalde, Vicent Grimalt y el vicealcalde, Rafa Carrió.

Una calle muy estrecha

Uno de los principales problemas que presentan estas obras es la accesibilidad. La antigua casa señorial se encuentra en la calle Cavallers, una vía estrecha, por la que no pueden acceder camiones de gran tamaño y tampoco maquinaria pesada.

Por este motivo, según indicó la edil, la empresa deberá escoger un tipo de maquinaria de pequeño tamaño. Además el consistorio ha desmontando un parque infantil próximo para que sirva de espacio de acopio de materiales.

Las obras se prolongarán durante 8 meses y serán ejecutadas por Obremo. El presupuesto es de 493.916 euros, y se financian con el Plan Confianza, aprobado hace ahora diez años.

Según indicó la concejala la empresa deberá delimitar todo el perímetro de la obra y buscarán la «máxima coordinación» para que las molestias a los comercios y vecinos sean las mínimas.

No obstante Ripoll reconoció que pueden haber momentos en que esas molestias «no se puedan evitar» sobretodo en las primeras semanas de trabajo, en las que se ejecutará la demolición del interior de la vivienda.

La Casa de la Marquesa Valero de Palma será sometida a completo lavado de cara, para convertirla en el futuro Museo de Historia de la Ciudad. Se adecuarán las instalaciones a las necesidades museísticas y será adaptada a la normativa en vigor en lo referente a barreras arquitectónicas.

Tendrá un nuevo acceso desde la calle Ramón y Cajal, realizando un forjado al nivel de la calle desde el cual se podrá acceder a la planta baja mediante una nueva escalera o ascensor. El edificio consta de planta semisótano, planta baja, planta primera, segunda y cubierta.